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Con un despliegue dominante en la pintura y una defensa efectiva, Canadá mantuvo su invicto en el Grupo C al vencer 88-71 a República Dominicana.

Análisis del partido: el dominio canadiense en todas las facetas

El encuentro en el SaskTel Center de Saskatoon mostró a un equipo canadiense superior tanto en estrategia como en ejecución. Desde el primer cuarto, los locales establecieron su control con rachas ofensivas oportunas y una defensa que limitó las opciones dominicanas en los momentos clave.

Un aspecto crucial del partido fue la batalla en la pintura, donde Canadá no solo ganó en puntos (52-39), sino también en segundas oportunidades (21-12). La combinación de fuerza física, precisión en los pases y profundidad en el banquillo dejó a República Dominicana sin respuestas para frenar el ataque constante de los norteamericanos.

El entrenador Nate Mitchell utilizó su equipo con eficacia, destacándose el debut de Mfioundu Kabengele, quien anotó 17 puntos, 7 rebotes, un robo y 2 bloqueos en solo 17 minutos. Su presencia fue un verdadero desafío para los dominicanos, quienes no lograron contener su impacto en ambos extremos de la cancha.

La respuesta dominicana: momentos brillantes, pero insuficientes

El equipo de Néstor “Che” García mostró destellos de competitividad, especialmente en el segundo cuarto, donde lograron una racha de 7-0 que redujo la ventaja canadiense a menos de diez puntos. Sin embargo, la consistencia ofensiva de Canadá, liderada por jugadores como Quincy Guerrier y Marcus Carr, sofocó cualquier intento de remontada.

LJ Figueroa fue el máximo anotador de República Dominicana con 18 puntos, mientras que Víctor Liz aportó 14 puntos y 7 rebotes. Omar Silverio sumó 12 puntos en una noche en la que el esfuerzo colectivo fue evidente, pero no suficiente frente al despliegue físico y técnico del rival.

Un vistazo a las estadísticas: claves del triunfo canadiense

Aunque ambos equipos mostraron dificultades desde el perímetro, Canadá compensó esta carencia con una efectividad notable en tiros dobles (27/44). Su capacidad para generar puntos en jugadas de segunda oportunidad y controlar el ritmo del juego marcó la diferencia.

Por otro lado, República Dominicana tuvo un desempeño superior en los tiros libres, pero esto no fue suficiente para contrarrestar las ventajas que Canadá construyó en otras áreas del juego.

Lo que viene para ambos equipos

Con este triunfo, Canadá mejoró su récord a 3-0 en el Grupo C, consolidándose como el líder indiscutible. Su próximo reto será ante México, un equipo que también busca afianzar su posición en la tabla.

República Dominicana, ahora con marca de 1-2, enfrenta un desafío crucial contra Nicaragua, el equipo más débil del grupo. Una victoria es imprescindible para mantener vivas sus aspiraciones de avanzar a la FIBA ​​AmeriCup 2025.

¿Un salto de calidad o una brecha insalvable?

El partido dejó en claro la brecha que existe entre los equipos de mayor profundidad y los que dependen de esfuerzos individuales. Para República Dominicana, el reto está en ajustar su estrategia colectiva y encontrar maneras de maximizar el talento de sus jugadores clave.

Canadá, por su parte, demuestra que su crecimiento en el baloncesto no es casualidad. Con un enfoque en el desarrollo de talento y un cuerpo técnico que sabe aprovechar al máximo sus recursos, los norteamericanos están marcando el estándar en el Grupo C.

El camino hacia la clasificación está lejos de terminar, pero este partido fue un recordatorio de lo que se necesita para competir al más alto nivel en América. República Dominicana tiene las herramientas para mejorar, pero deberá utilizarlas de manera más efectiva si quiere cerrar esta etapa con éxito.