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Con el anuncio de los finalistas para los premios individuales de la temporada, se conoció que el MVP de la NBA se definirá entre Joel Embiid, Nikola Jokic y Giannis Antetokoumpo. Algo lógico teniendo en cuenta el rendimiento de los tres durante la temporada. Lo llamativo, es que nuevamente habrá ausencia de jugadores locales en la terna final.
Si bien el pívot de los Sixers, el pívot de los Nuggets y el escolta de los Bucks han sido los dominadores de las estadísticas individuales, lo curioso es que no hay ningún estadounidense que se haya metido entre los mejores del año. El último jugador nacido en Estados Unidos en ser nominado al MVP fue Stephen Curry en 2020, compartiendo candidatura con Giannis y Jokic.
James Harden, en 2018 y como jugador de Houston Rockets, fue el último jugador nacido en Estados Unidos que se alzó con un galardón que solo había recalado en dos ‘extranjero’ y en tres ocasiones hasta ese año: el canadiense Steve Nash lo conquistó en dos ocasiones (2005 y 2006), y el alemán Dirk Nowitzki, en una (2007). Con Hakeem Olajuwon sería tres veces: el pívot nigeriano nacionalizado estadounidense lo ganó en 1994.
De los 67 MVPs repartidos desde 1956, 59 han sido para jugadores nacidos en una cuna del baloncesto que en los últimos cuatro años ha visto como Antetokounmpo y Jokic se han llevado en dos ocasiones cada uno de ellos el ahora bautizado como Trofeo Michael Jordan (hasta 2022 Trofeo Maurice Podoloff). El griego lo ganó en 2019 y 2020 y el serbio, en 2021 y 2022.
El pívot camerunés Embiid es el gran candidato para alzarse con el MVP esta temporada tras cerrar la fase regular como máximo anotador de la NBA con 33,1 puntos de media y conducir a sus Sixers a la tercera posición de la Conferencia Este con un balance de 54-28. Sería el segundo MVP que tiene sello africano tras el mencionado de Olajuwon en 1994.