Fuentes de The Athletic dicen que los Lakers mostraron cierto interés encubierto en discutir un posible intercambio de Westbrook con ejecutivos rivales a principios de esta temporada. Un acuerdo que parece extremadamente improbable antes de la fecha límite de cambios del 15 de febrero, aunque solo sea porque su acuerdo, que una vez fue visto por muchos como intransferible, es un obstáculo enorme. Pero dentro de los Lakers, parece, hay cierto reconocimiento de que esto no ha salido como (James y Davis) planearon.
Mientras tanto, en Lakers Land, donde LeBron James y Anthony Davis pasaron el verano entrevistando a una variedad de jugadores estrella que esperaban aligerarían su carga de trabajo, es la presencia de Russell Westbrook la que ha demostrado ser tan problemática. Sigue siendo un ajuste incómodo entre Westbrook y los Lakers, por decir lo menos, especialmente con su enorme salario (44,2 millones de dólares esta temporada, opción de jugador de 47 millones de dólares para la próxima temporada).
Una cosa era cuando los cazatalentos del equipo contrario (junto con Tim Legler de ESPN) recomendaban que se convirtiera en el sexto hombre de los Lakers en solo cinco juegos . Pero ya han pasado 39 partidos, amigos. Y aunque Westbrook pasó claramente la prueba a fines de julio, cuando se unió a gente como DeMar DeRozan y Damian Lillard en (esencialmente) entrevistas para este trabajo como la tercera estrella de los Lakers dentro de la casa de James , ese no ha sido el caso durante este tramo de nueve juegos en el que Davis ha sido marginado con un esguince de MCL (y los Lakers se han ido 4-5).
Como lo expresó el cazatalentos de un equipo contrario el martes por la noche cuando teoricé que Westbrook fue traído en parte a los Lakers para estos momentos en los que una de sus otras dos estrellas estaba fuera, “Es solo un seguro si LeBron cae. … No puedes tener dos balones durante 48 minutos, (y) Russ es inútil sin el balón y demasiado errático con el balón “.
Excepto en su última salida, por supuesto.
Sí, Westbrook rompió su racha de 407 juegos consecutivos con al menos una pérdida de balón en la victoria del martes por la noche sobre Sacramento e incluso registró una marca de más 17 (aunque falló 12 de 19 tiros). Y sí, los Lakers (20-19, séptimo en el Oeste) han ganado cuatro de sus últimos cinco partidos.
Pero es la grandeza de James (con un promedio de 34,3 puntos, 9,8 rebotes, 5,9 asistencias en los últimos nueve juegos) y la aparición de Malik Monk, que se suma al salario mínimo desde que se convirtió en titular hace cinco juegos (20,8 puntos con un 55,6 por ciento y un 45,9 por ciento en la temporada). de 3 en 7.4 intentos por juego) que los ha mantenido a flote sin Davis. Solo eche un vistazo a las divisiones intermitentes durante este tramo sin Davis.
- James (últimos nueve juegos): rating neto de más 2.7; menos-17,7 de descuento (20,4 swing).
- Westbrook (últimos nueve juegos): menos-0.5 en; menos-8.2 de descuento (7.7 swing).
- Y luego está Monk, el ex seleccionado No. 11 de Kentucky en 2017 cuya historia, como su juego, se ha encendido últimamente : más 13 en adelante; menos-1.9 (14.9 swing) durante su racha inicial de cinco juegos.
Como siempre, la producción general de Westbrook en estos últimos nueve juegos ha sido en numeros tradicionales voluminosa promediando 19.9 puntos, 9.3 rebotes y 7.7 asistencias. Pero incluso con el valor atípico del martes en el frente de las pérdidas de balón, su falta de control del balón y tiros ineficientes (49.6 porcentaje de tiro real en ese lapso) cobran gran importancia para un equipo de los Lakers que, de alguna manera, todavía está luchando por la posición de playoffs a medida que se acerca la mitad de la temporada.