La polémica sobre el futuro de Los Angeles Lakers y Russell Westbrook pica y se extiende. Después de acabar con récord de apenas 33 victorias y 49 derrotas en la última temporada, el cuadro que viste de oro y púrpura firmó una de sus peores cursos a nivel histórico, lo que desembocó en múltiples críticas por parte de los fanáticos hacia varios elementos del equipo, entre ellos el ya mencionado jugador.
De ahí en adelante, lo que han corrido rumores sobre la separación de caminos del club y el baloncestista, pero nada se ha concretado. De momento, él sigue siendo propiedad del quinteto californiano y sigue esperando algún mensaje de la franquicia, sea para mantenerse dentro de ella o bien para marcharse a un nuevo destino.
El rancho ardiendo
El pasado martes se suponía que los Lakers darían pistas o definitivamente se manifestarían sobre la hostil situación en una rueda de prensa que habían pautado y el planeta basquetero estaba expectante. Sin embargo, nada ocurrió. La misma fue cancelada sin motivos aparentes o expresos, cuestión que ha levantado más sospechas todavía.
A esta circunstancia se suma una muy extraña publicación realizada en la red social Instagram por Nina Earl, esposa de Westbrook, la cual contenía el siguiente mensaje que desde ya muchos piensan que es una comunicación encriptada:
“Una botella de agua puede costar 1 dólar en un supermercado, 3 dólares en un gimnasio, 5 dólares en un cine, 6 dólares en un avión y 10 dólares en unas vacaciones. La misma agua. Lo único que cambia el valor es el lugar. Así que la próxima vez que sientas que no vales nada, tal vez solo estés en el lugar equivocado”.
Esto fue tomado por varios entendidos del juego y algunos seguidores como una clara referencia al trato que la señora Westbrook cree que se le ha dado a su marido en Los Angeles. ¿Será que la salida es inminente?