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Con tres multas en un año calendario, la liga parece decidida a enviar un mensaje, pero ¿es este mensaje realmente una advertencia a los equipos o responde más bien a los intereses de sus socios comerciales, especialmente aquellos del sector de apuestas?
La polémica de la transparencia y el negocio detrás de las lesiones
La NBA multó a los Sixers con 100.000 dólares tras declaraciones sobre el estado físico de Embiid, quien aún no ha debutado en la temporada 2024-25. Si bien la liga no llegó a afirmar que Embiid estuvo ausente sin justificación, la controversia se disparó tras el partido inaugural televisado a nivel nacional frente a los Milwaukee Bucks. La NBA señala que los comentarios públicos de los dirigentes del equipo podrían haber sido engañosos, lo cual afecta tanto a los aficionados como a los apostadores, dos grupos cruciales para la liga.
Este tipo de situación ha sucedido antes. En temporadas anteriores, los Sixers fueron multados por casos similares en los que el estado de salud de Embiid se reportó como “disponible”, para luego no jugar, o donde inicialmente estaba “fuera” y luego saltó a la cancha, afectando el análisis anterior. de los equipos contrincantes y también las decisiones de los apostadores. Pero, mientras antes la falta de claridad podía percibirse como una estrategia competitiva, este año el contexto parece haber cambiado hacia algo más orientado a proteger la relación de la NBA con sus socios de apuestas.
¿Manipulación del sistema o protección a las apuestas deportivas?
La NBA siempre ha buscado garantizar la equidad en el juego y la transparencia en los informes de lesiones para evitar ventajas competitivas desleales. Sin embargo, en este caso, los Sixers no han insinuado que Embiid está listo para jugar, y el problema parece estar más bien en el ámbito de las apuestas deportivas. Aquí, la NBA ha cambiado su foco, protegiendo más la información relevante para los apostadores y menos la competitividad entre los equipos.
Hoy en día, la NBA cuenta con Múltiples socios de apuestas, y cadenas como ESPN, que tiene su propia casa de apuestas, no son indiferentes a los efectos de estas decisiones en el ámbito de las apuestas. Esto marca una nueva era en la liga, en la cual los informes de salud de los jugadores tienen un impacto directo en la integridad de las apuestas. Por lo tanto, cuando un equipo cambia su reporte sobre la condición de una estrella como Embiid, la afectación no solo se da en el plano deportivo, sino también en la economía de las apuestas.
La política de participación de jugadores y el peso de la televisión.
La NBA implementó una política que exige la participación de las estrellas en juegos televisados a nivel nacional, en un esfuerzo por proteger a sus socios de transmisión. A medida que las expectativas de los espectadores y la inversión de los patrocinadores aumentan, los equipos se enfrentan a una presión constante para alinear a sus mejores jugadores en estos partidos. Si bien la liga busca el espectáculo y satisfacer a sus televisores, en casos como el de los Sixers, parece evidente que las apuestas deportivas también tienen un papel fundamental en las sanciones.
Esta vez, la falta de claridad respecto al estado de Embiid afecta sobre todo a aquellos que han hecho apuestas a largo plazo. En este sentido, los Sixers no parecen estar alterando la integridad del juego, sino afectando, de manera indirecta, la de las apuestas.
¿Impacto real de las multas o simple formalidad?
Para un equipo que ha firmado contratos millonarios y cuenta con planes de expansión como un estadio nuevo de 1.300 millones de dólares, una multa de 100.000 dólares es insignificante. A jugadores como Embiid, quien firmó una extensión de 193 millones, o Tyrese Maxey, quien renovó por cifras similares, una multa de este tipo no representa un disuasivo real. En este contexto, la liga parece estar usando estas multas más como una formalidad que como un castigo efectivo.
Además, Embiid tampoco ha salido ileso de esta situación. Pese a no haber jugado aún en la temporada, la NBA lo sancionó con una falta técnica por animar desde el banquillo, una acción que refleja el nivel de escrutinio al que está sometido.
¿Una tendencia preocupante?
Estas sanciones plantean interrogantes sobre el futuro de la relación entre la NBA, los equipos y los apostadores. La liga está tratando de adaptarse a la era de las apuestas deportivas, pero al hacerlo, debe equilibrar el respeto a los aficionados, la integridad del juego y los intereses de sus socios comerciales. La multa a los 76ers podría sentar un precedente donde la transparencia en el estado de los jugadores no solo es necesaria por razones competitivas, sino también para proteger un mercado multimillonario en apuestas que, claramente, llegó para quedarse.
Para los Sixers, el costo de estas multas parece mínimo, pero para la liga, este tipo de sanciones podría ser solo el principio de un ajuste mucho mayor en la relación con el juego y las apuestas deportivas.