“Vaya, parece que ya has tuiteado eso”, debe decir en las principales cuentas de noticias que quieran informar sobre la nueva derrota de Los Ángeles Lakers que complica su presencia en la postemporada. Anoche, los angelinos cayeron ante Nueva Orleans y quedaron un juego debajo de San Antonio, el, por ahora, último clasificado al mini torneo.

Y eso que los Lakers contaron con el regreso de Anthony Davis, que se sumó a un LeBron James (que si estaba para bromas de April’s Fools, es porque estaba con ánimo de ganar). Juntos se combinaron para 61 puntos, pero siguen estando muy solos en la distribución de protagonismo.

El alero colaboró con 38 tantos en 40 minutos de juego, lo que hace que tenga un desgaste inesperado a esta altura de la temporada, cuando se supone que podía administrar más sus energías. El pívot, por su parte, anotó 23 y capturó 12 rebotes en 37 minutos en cancha.

Pero de sus compañeros, ninguno superó los 13 puntos. Ni Westbrook (12), ni Bradley (10), ni Monk (13), aportaron demasiado entre los que jugaron más minutos. Y así, imposible aspirar a un buen papel, no solo en la postemporada, sino en el play-in.

Entre los Pelicans, el mejor del juego fue CJ McCollum que aportó 32 puntos, seguido de Brandon Ingram, con 29. Nueva Orleans está viviendo una segunda mitad de ensueño, en el que remontaron posiciones y ya se ubican tres juegos por encima de los Lakers, casi confirmando su pase al play-in.

Los Lakers deben esperar una caída de San Antonio (venció por paliza a Portland, al que volverá a enfrentar mañana), mientras que los angelinos tendrán un difícil reto ante Denver. Luego, ninguno de los dos la tendrá fácil, ya que LeBron y compañía enfrentará a Suns, Warriors, Thunder y nuevamente a los Nuggets. Los Spurs, por su parte, luego de chocar ante los Blazers, también jugarán ante Denver y luego les tocará, Timberwolves, Warriors y Mavericks.