Los contratos en la NBA son uno de las cuestiones más importantes a la hora del armado de un equipo. Incluso, más importante que la táctica. El espacio salarial, el límite en el roster y, el monto a pagar a cada jugador son cosas que deben planearse bien. Sino, puede pasarle como a los Lakers.
La llegada de LeBron James a Los Ángeles en 2018 fue uno de los movimientos más importantes de los últimos años. Para eso, la franquicia californiana tuvo que prepararse bien y tomar algunas decisiones que facilitaran la llegada de la estrella al equipo. Y una de ellas fue cortar a Luol Deng.
El británico, de origen sudanés, había llegado a Lakers en 2016 con un contrato de cuatro años por 72 millones. Un monto alto para un alero que ya había pasado sus mejores años, como cuando fue compañero de Derrick Rose en Chicago Bulls. Pero los Lakers confiaron en él.
El problema es que Deng apenas jugó en Los Ángeles y, para el segundo año, solo estaba en el equipo de forma testimonial debido a una lesión en el talón de Aquiles. De esta forma, Deng arregló con el equipo renunciar a parte de su contrato y que los Lakers abonen 5 millones de dólares anuales hasta completar el monto acordado.
El problema es que Deng se retiró en 2019 después de intentar un regreso en Minnesota que no funcionó. Ahora, con esos cinco millones que deberá abonar Los Ángeles este año (es el último pago), el alero será el sexto mejor pago del plantel. Incluso cobrará más que los salarios de Carmelo Anthony y Dwight Howard juntos, que ficharon por el salario mínimo de veteranos.
Deng dejó la actividad definitivamente y ahora es el presidente de la Federación de Baloncesto de Sudán del Sur, país del que es originario, en el que también ejerce como seleccionador del equipo nacional.