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Si bien no es uno de los principales candidatos en la conferencia del Este, los Knicks de New York cuentan con un plantel con piezas más que interesantes y que les puede permitir volver a saborear el acceso a la postemporada, sobre todo desde que no cuentan con una figura relevante, como lo fuera en su momento Carmelo Anthony.
Posiblemente, el mismo hecho de no contar con algún jugador mediático, es algo que muy bien les puede favorecer, porque de esa forma están obligados a propiciar el juego en colectivo, algo que justamente les ha servido para llegar a las diez victorias en lo que va de fase regular.
Aunque la irregularidad es lo que más ha identificado a este equipo en esta primera parte de temporada, con algunas inconsistencias en cuanto a resultados; pero su mejor noticia ha sido sin dudas el desempeño que ha venido mostrando el ala-pívot Julius Randle, que está haciendo méritos para ser el jugador franquicia.
En la jornada de este martes, aprovechando que estaba en su cumpleaños #28, su equipo enfrentaba al peor equipo en la zona Este, los Detroit Pistons, los neoyorquinos simplemente los arroparon con un triunfo 140-110, apenas la segunda vez que este equipo alcanza esta cantidad de puntos, con Randle siendo punta de lanza, con una noche de 36 puntos en 31 minutos, con un buen 58,3% de acierto.
Ya en el partido anterior, ante un rival más exigente como Memphis, se había destacado con doble doble (14 puntos y 10 rebotes), a solo una asistencia de lograr el triple registro, aunque la victoria les haya sido esquiva.
Randle en lo que va de temporada, ha promediado 21,3 puntos por encuentro, junto con su compañero Jalen Brunson comparten el liderazgo en este renglón, además de 8,6 rebotes, logrando conformar una especie de dúo dinámico.
Pero estos dos buenos jugadores solo representan la “punta del iceberg” en esta franquicia; no se puede ocultar lo que han aportado elementos que ya han rendido en esta liga, como RJ Barrett, Quentin Grimes, Derrick Rose, Obi Toppin, Miles McBride e Immanuel Quickley, lo que apunta a pensar que pudiesen tener un mejor registro del que tienen.
Mientras rivalizan en el área del “Bronx” con otro equipo ávido de ganar como los Brooklyn Nets, los Knicks siguen esperanzados que Julius Randle siga siendo ese catalizador de victorias que les hagan olvidar las amargas temporadas anteriores.
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