La NBA siempre deja lugar a historias de vida muy curiosas. Hay muchos ejemplos de lo que es hacerse de abajo y llegar al estrellato. Quizás no todos se mantienen por el tiempo que quisieran pero el simple hecho de haber llegado significa muchísimo. Y Matt Ryan vive ahora sus momentos de gloria luego de haber luchado de abajo, bien de abajo, casi bajo tierra.
El alero se llevó todos los flashes tras haber sido el héroe de la noche en el triunfo de Los Ángeles Lakers sobre New Orleans Pelicans por 120-117 en un final de infarto. Un triple sobre la bocina puso las cosas 111-111, el cual forzó la prórroga en la que se construyó el segundo triunfo del equipo en la temporada y que ahora registra un saldo de 2-5. Pero ¿quién es Matt Ryan?
Con 25 años, la llegada de Ryan a la NBA fue producto del esfuerzo y de no darse por vencido ante los constantes cambios. Tiene la particularidad de haber jugador para tres Universidades distintas, lo cual denota una irregularidad que, para muchos, es letal en las aspiraciones de llegar a le élite, ya que la NCAA obliga a estar un año sin jugar al primer cambio.
Llegó a la Universidad fichando para Notre Dame, pero luego fue transferido a Vanderbilt y, finalmente, recaló en la Universidad de Tennessee en Chattanooga. Por eso mismo, los cambios en los horarios lo obligaron a aplicar para trabajos de medio tiempo como repartidor de comida rápida o, incluso, mantenimiento en un cementerio.
Cada mañana, Matt Ryan aparecía puntualmente a las 7.00 horas en el cementerio de Yonkers, en Nueva York, para comenzar su jornada de trabajo. En ocasiones, llevaba ocho capas de ropa puestas para combatir los seis grados bajo cero que había. Su labor era cortar el césped, limpiar los palos y las hojas del suelo, colocar tierra fresca cerca de las tumbas.
Desde luego, no era el trabajo de su vida. Tampoco parecía una gran aspiración para alguien licendiado en Económicas y con un Máster. Pero sí era uno que le permitía compatibilizarlo con cuatro horas de entrenamiento en solitario diarias. Su sueño era jugar en la NBA. Y lo consiguió. Aunque también fue duro llegar.
Se presentó al Draft de 2020 pero no fue escogido por ninguna franquicia, pero los Cleveland Cavaliers le dieron la posibilidad de jugar la Summer League de 2021 con ellos. Fue contratado por Denver aunque fue cortado poco después, por lo que tuvo que firmar con los Grand Rapids Gold de la G-League para los que jugó una temporada completa. En febrero de este año fichó para Boston Celtics y en septiembre arribó a los Lakers, donde ahora fue el héroe del triunfo.