Dos situaciones opuestas en esta jornada de la NBA. Por un lado, Minnesota en un momento dulce con triunfos que lo acomodan en la Conferencia Oeste luego de perder ocho de nueve juegos. Y por el otro, uno de los peores equipos de la liga, Nueva Orleans, que solo se ubica por encima de Houston en la clasificación.
Por lo tanto, el resultado fue lógico, lo que generalmente reina en el baloncesto. Fue 110-96 para los del norte de Estados Unidos que llegaron a su cuarta victoria al hilo y se acomodaron en la zona de ingreso al Play-In.
Importante fue el dominicano Karl-Anthony Towns, que consiguió 28 puntos y 10 rebotes convirtiéndose en el goleador, no solo de su equipo, sino del partido entero. El dominio del central se extendió por todo el juego, en el que gracias a su poder ofensivo, como a su defensa, los Pelicans nunca se pudieron acercar en el marcador.
Anthony Edwards anotó 13 de sus 18 puntos en la segunda mitad y Jarred Vanderbilt, quien llegó al juego con promedio de cinco puntos por partido, igualó su mejor registro de la temporada con 16 unidades y bajó 11 rebotes.
Willie Hernangomez aportó 19 puntos y 11 rebotes para Nueva Orleans, mientras que Nickeil Alexander-Walker agregó 14. Pero los Pelicans no obtuvieron la producción habitual de Brandon Ingram, quien atinó 2 de 13, incluido 1 de 7 de larga distancia, y terminó con nueve puntos y seis balones perdidos.
Tras vencer este encuentro, el siguiente duelo de Minnesota Timberwolves será contra Miami Heat en el Target Center, para intentar mejorar su récord de 8-9 que lo ubica en la parte media del Oeste. Por su parte, New Orleans Pelicans quedó en el fondo con un registro de 3-16 y se enfrentará a Washington Wizards en el Smoothie King Center.