En toda la historia del baloncesto de la NBA, ha habido muy buenos profesionales del banquillo, que previamente también fueron exitosos en sus épocas como jugador, otros quizás no tanto, pero hay uno que muy posiblemente siempre va a destacar por encima del resto.
Es el caso de Phil Jackson, quien llegó a ganar la módica suma de 11 campeonatos como entrenador, además de sumar 2 como jugador; es decir, 17% de los campeonatos NBA fueron conquistados por el denominado ‘Maestro Zen’ de la dirección técnica.
Nacido en la localidad de Deer Lodge, Washington DC, un 17 de septiembre hace ya 77 años, formando parte de una familia con mucha afinidad religiosa hacia el movimiento pentecostal, con sus estrictas reglas de comportamiento social, en donde no se permitía ni ver televisión ni bailar desde muy pequeño.
Sin embargo, esto no logró afectar el desarrollo del pequeño Phil, quién tuvo su primer acercamiento hacia el deporte, pero practicando béisbol, siendo un destacado lanzador, también llegando a practicar Fútbol Americano y Atletismo; sin embargo, su estatura cercana a los dos metros, le terminó de inclinarse por el deporte de los más gigantes.
Fue tomado por los New York Knicks en la ronda de 1967, aunque especialistas en ese momento indicaban que no poseía las mejores cualidades para jugar al baloncesto, pero si con una inteligencia por encima del promedio de jugadores, y a través de ella se pudo mantener en cancha, ganando el campeonato de 1970, aunque en esta edición estuviera ausente por una cirugía espinal, pero si estuviese en el título de 1973 con los del ‘Bronx’.
Como jugador activo estuvo hasta 1980, vistiendo el uniforme de los New Jersey Nets en sus dos últimos años; entonces, iniciara su brillante carrera como entrenador, primeramente, en la ‘Continental Basketball Association’ (CBA) y también en la BSN de Puerto Rico. En la CBA, obtuvo su primer título con los Albany Patroons.
Sus buenos registros como coach le llevaron a ser contratado por los Bulls en 1989, con quienes se mantuvo por 10 temporadas, y en donde ya sabemos lo que pudo hacer; teniendo a Michael Jordan en su mejor momento, además de Scottie Pippen, Horace Grant, y más adelante a Dennis Rodman, obtuviera sus seis primeros campeonatos en la NBA.
Se dio el lujo de tomarse un año sabático, para luego firmar con los Lakers, un equipo más que favorito, encabezado por Kobe Bryant y Shaquille O’Neal, ganando los 3 anillos consecutivos desde el 2000 al 2002; dos años después los Lakers volverían a las finales, pero cayeron ante los Detroit Pistons, y nuevamente Jackson decide retirarse por un año.
En el 2005 regresaría a la franquicia de California, pero esta vez con un conjunto en reconstrucción, tras la salida de O’Neal, contando aún con Bryant y al ya veterano Dereck Fisher, así como el español Pau Gasol; con el equipo ya mejor amalgamado, logró alzarse con los campeonatos de 2009 y 2010, y ya sumaba 11 títulos como coach en la NBA, convirtiéndose en toda una leyenda.
Siempre se le reconoció su buen carácter, temple y paciencia al tener la capacidad de saber manejar algunos jugadores difíciles, como el propio Rodman en Chicago, además del conflicto más que notorio entre Kobe Bryant y Shaquille O’Neal en Los Ángeles. Acá, sus técnicas de motivación ‘Zen’ dieron los mejores resultados.
En el 2013 volviera a la que fue su primera casa, al convertirse en el presidente de los Knicks, ocupando ese cargo por lapso de cuatro años; sus conocimientos en psicología y múltiples experiencias en los tabloncillos, le motivaron a escribir hasta 8 libros. Durante su estadía en Lakers, estuvo vinculado sentimentalmente con su propietaria Jeanie Buss, sin llegar a contraer matrimonio.
Pero sin duda alguna, siempre se le recordará por poseer uno de los récords más difíciles de superar en la NBA: sus 11 campeonatos como entrenador, superando los 9 títulos de Red Auerbach, y los 5 de otro par de leyendas como Gregg Popovich y Pat Riley.
Algunos dirán que ha sido gracias a Jordan y luego a Kobe Bryant; de cualquier modo, estamos seguros que ha sido el mejor coach que ha pasado por esta liga en sus 75 años de existencia. Larga vida al ‘Maestro Zen’.