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Chicago ha estado trabajando para que Ball recupere su forma física y ha jugado entre 13 y 18 minutos en tres de los cuatro partidos de los Bulls. Se perdió el partido de los Bulls contra los Milwaukee Bucks para descansar la rodilla y la esperanza es que no se vea obligado a perderse mucho más de 10 días debido a este problema en la muñeca.
El partido más reciente de Ball, una victoria de los Bulls contra los Memphis Grizzlies el lunes por la noche, fue su actuación más alentadora hasta el momento. Jugó 18 minutos, su mejor marca de la temporada, y anotó dos triples en cuatro intentos. También tuvo seis asistencias, mostrando la elite de creación de juego que lo convirtió en una promesa antes de sus lesiones. Ball también estaba teniendo un impacto en la defensa e incluso bloqueó un tiro.
Ball tendrá que superar una montaña difícil cuando regrese, especialmente si esta lesión afecta su tiro en suspensión. Ya se está viendo obligado a encontrar un ritmo después de tanto tiempo fuera, al mismo tiempo que se desenvuelve en una línea de fondo de los Bulls muy concurrida y llena de jugadores jóvenes. Chicago está actualmente jugando de titulares con Zach LaVine, Josh Giddey y Coby White y tiene a Ball, Dalen Terry y Ayo Dosunmu saliendo del banquillo.
Si Ball puede acercarse a su mejor nivel, proporcionará un arma única para que los Bulls utilicen en ambos lados de la cancha. Antes de su lesión, se había convertido en un tirador muy confiable desde afuera a pesar de jugar constantemente con su tiro y se había ganado una reputación como un muy buen defensor del perímetro.