Con drama y suspenso hasta el final, hasta los siete minutos finales del sexto juego, así definieron los Warriors de Golden State y los Grizzlies de Memphis su serie semifinal.
El elenco de Tenesse dio una hermosa clase de baloncesto desde el comienzo, con Dillon Brooks y Desmond Bane sacando la casta de guerreros frente a Stephen Curry y compañía.
Férrea defensa
La presión ejercida en defensa por el dueto de Brooks y Bane, provocó que los Warriors perdieran hasta 16 balones y por ende este aspecto contribuyó a que el duelo se mantuviera parejo hasta el último cuarto, cuando un triple del mismo Desmond Bane pegó a los Grizzlies a solo dos puntos, 87-89.
A partir de aquí la historia cambió y el elenco de la Bahía sacó su artillería pesada y no frenó hasta cerrar un parcial de 21-3.
Los tipos duros
Y estaba Curry en noche de gala con 29 tantos, pero sim dudas el hombre orquesta fue Klay Thompson con 30 unidades y todo su arsenal de tiros de tres puntos en estado óptimo.
Un triple decisivo de Thompson puso cifras finales de 105-92 con menos de tres minutos por jugar.
Y si Curry y Thompson se volvieron a unir para guiar la ofensiva de los Warriors, también es justo resaltar el importante rol de Kevon Looney, que se llevó 22 rebotes en misiones defensivas e nfluyó en que Golden State certificara su dominio en este importante parámetro del juego.
De infarto
Sin dudas un sexto juego de infarto, en el que los Grizzlies, incluso sin su estrella Ja Morant dieron la sensación de que podían empatar la serie y forzar el séptimo partido.
En el recuerdo de la afición quedaran grabadas las historias de este grupo de jugadores sensacionales que regalaron un Play Off de altísimo nivel, ante uno de los mejores equipos de la historia.