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Aaron Judge sigue deslumbrando a los aficionados del béisbol y dejando su huella en la historia de las Grandes Ligas. En la noche del viernes, el cañonero de los Yankees sumó otro cuadrangular a su ya impresionante colección de la temporada, alcanzando la cifra de 49 jonrones en lo que va del año. Este cañonazo, un solitario disparo hacia el jardín izquierdo contra Kyle Freeland de los Rockies, no solo ayudó a los Yankees a asegurar una victoria por 3-0, sino que también marcó el cuarto juego consecutivo en el que Judge envía la pelota más allá de las cercas.
Lo que hace aún más notable la hazaña de Judge es la proyección de su rendimiento actual. Con 49 cuadrangulares a estas alturas de la temporada, se espera que Judge cierre el año con 61 vuelacercas, apenas uno por debajo de su récord personal y de la Liga Americana, establecido en 2022 con 62 jonrones. Esta marca no solo consolidaría su estatus como uno de los bateadores más temidos de la MLB, sino que también reavivaría el debate sobre si Judge es, de hecho, el mejor toletero de esta era.
El impacto de Judge no ha pasado desapercibido entre sus compañeros de equipo. Giancarlo Stanton, quien sabe un par de cosas sobre el poder en el plato, comparó recientemente el desempeño de Judge con “un videojuego”. Los números ciertamente respaldan esta afirmación, ya que Judge ha acumulado jonrones a un ritmo que desafía la lógica. En sus últimos ocho juegos desde el 14 de agosto, ha conectado siete jonrones. Si ampliamos la muestra, ha disparado ocho cuadrangulares en sus últimos 11 partidos, 14 en sus últimos 25 encuentros y 17 en sus últimos 34. Esta consistencia y frecuencia en conectar cuadrangulares han dejado boquiabiertos a los fanáticos y rivales por igual.
A pesar de esta asombrosa racha, lo más sorprendente es que, según el mánager de los Yankees, Aaron Boone, Judge no parece estar en su punto máximo. “Lo más increíble sobre lo que está haciendo Aaron ahora mismo es que no está necesariamente encendido ni nada de eso”, comentó Boone antes del juego del viernes. “Es así de bueno”. Estas palabras subrayan la idea de que, para Judge, lo que otros considerarían una racha caliente es simplemente su estándar habitual.
Esta no es la primera vez en la temporada que Judge conecta jonrones en cuatro juegos consecutivos. Ya lo había logrado entre el 22 y 25 de mayo, mostrando que su capacidad para producir en momentos clave es una constante. Esta habilidad para mantener su nivel de juego a lo largo de la temporada es lo que lo separa del resto, y es precisamente lo que lo tiene encaminado a otra campaña histórica.
Con más de un mes restante en la temporada regular, Aaron Judge tiene tiempo de sobra para continuar sumando a su total de jonrones. Los fanáticos de los Yankees, y del béisbol en general, observarán con gran interés para ver si puede alcanzar, o incluso superar, su récord de 62 jonrones. Pero más allá de los números, lo que Judge ha demostrado este año es su capacidad única para combinar poder y consistencia, estableciéndose como uno de los grandes del deporte.
Independientemente de si alcanza los 61, 62 o 63 jonrones, una cosa es segura: Aaron Judge está dejando una huella imborrable en la temporada 2024, y cada juego es una nueva oportunidad para ser testigo de la grandeza.