Alfonso Soriano tuvo una carrera fascinante, incluso para muchos es merecedor del Salón de la Fama.

Desde que llegó impactó la liga.  Su segundo año fue monstruoso, bateó 39 jonrones y 51 dobles mientras lideraba la Liga Americana con 41 robos, 128 carreras y 209 hits. Terminó tercero en la votación de MVP y esa combinación de potencia y velocidad mientras jugaba en la segunda base lo convirtió en uno de los grandes jugadores de fantasía de todos los tiempos. Soriano conectó 412 jonrones y se robó 289 bases. Formó siete equipos All-Star y acumuló más de 1,100 carreras anotadas y remolcadas.

En 2006, como jardinero de los Nacionales, logró el hito de 40 bases robadas y 40 jonrones en una campaña, uniéndose a Barry Bonds, José Canseco y Alex Rodríguez.

Una gran temporada que lo convirtió en términos de percepción en un jugador de fantasía. Esto hizo que el mundo del beisbol lo sobrevalorara. Soriano nunca atrajo un gran cúmulo de bases por bolas, su porcentajes de embase fueron más decentes que excelentes: .334 entre 2002 y 2008, su mejor tramo como jugador. Defensivamente, nunca fue un segunda base de nivel, le costó 73 carreras a la defensa a Yankees y Texas, lo que lo que provocó un cambio al jardín izquierdo.

Después de tres años en Nueva York, los Yankees lo cambiaron a los Rangers en el canje de Alex Rodríguez . Sus dos temporadas en Texas no fueron tan buenas y los Rangers lo cambiaron a los Nacionales por Brad Wilkerson. Después de una gran temporada de 46 jonrones y 41 robos para Washington, firmó ese contrato monstruoso de ocho años y $ 136 millones con los Cachorros.

El acuerdo fue criticado casi de inmediato dados los mediocres porcentajes de embase de Soriano, la falta de experiencia en el jardín izquierdo y la edad: tendría 31 años para la temporada 2007 (había admitido en 2004 que era dos años mayor que la edad indicada).Y si, los Cachorros fracasaron.

No fue tan bueno después del 2006. Su WAR de carrera fue de 27.2. Bastante bajo. Aún así hay que destacar su raro combo de potencia y velocidad y, durante algunos años, uno de los jugadores más emocionantes del juego. ¿Cuándo será la próxima vez que veamos un jugador 40/40?

Incluso, si Rivera no hubiera desperdiciado el salvamento del juego 7 de la final del año 2000, Soriano sería recordado para siempre como un héroe de los Yankees. Conectó el jonrón de la ventaja en el Juego 7 de la Serie Mundial antes de que Mariano Rivera permitiera dos carreras en la parte baja de la novena.