Usted podrá rezar, embalsarmarse, echarse agua, bañarse en el mar o decir lo que le dé la gana. Quizá tiene dinero para importa agua del río Jordán, pero eso no sirve de nada; el nombre del juego, y de la vida, se llama resultado.  La existencia humana es una relación de causa-efecto y esto parece que ahora es cuando Fernando Tatis Jr. cae en cuenta de ello.

El periodista Dennis Linn, quien es el beat writer de los Padres de San Diego para el diario digital The Athletics, informó a través de su cuenta de Twitter que aún no se sabe cuándo será la reunión privada entre el pelotero; A.J. Preller, gerente del equipo y Peter Seidler, dueño y CEO de los curitas californianos.

Con tan solo tener conocimiento de lo que ha sucedido con este caso uno puede inferir cuál será el punto de inflexión de la reunión: la irresponsabilidad sostenida del jugador. Presler lo llegó a llamar un patrón de conducta. 

Y es que la confianza se ha ido horadando con el paso de los días. El dueño del equipo le declaró a la prensa de california “Yo confío en Fernando”. Esta era dándole un voto de confianza, luego de lo ocurrido en diciembre, cuando el pelotero sufrió un accidente de moticicleta en su natal San Pedro de Macorís.

La reunión con el dueño será el sábado, según informaciones publicadas en diversos foros concernientes a los Padres de San Diego. Las redes sociales en Estadoas Unidos y diferentes podcast no están muy contentos  con lo que ha pasado y el costo de las camisetas de Tatis se han despomado a precio irrisorios. Hay enojo en el grueso de la fanatica. Hay enfado… y no precisamente ni con MLB ni con los Padres, con el pelotero.

No es sencillo manejar toda esta presión. Pero de todo lo malo se sacan cosas buenas. Más que decir que es un complot y buscar teorías conspiranoicas donde no las hay, se debe aprender de los errores, enmendar la plana y seguir adelante. Toda caída es una nueva oportunidad para levantarse.