El pitcheo de los Yankees de Nueva York sin lugar a dudas ha sido uno de los mejores de los 30 equipos de las Grandes Ligas de Béisbol.

El mánager de la divisa, Aaron Boone sabe lo que tiene y quiere tratar de proteger a los serpentineros de la novena de la Gran Manzana a todas costas.

Sin embargo, a este, no le parece desagradar la idea de que estén en el Clásico de mitad de temporada en el Dodger Stadium, parque en el cuál se celebrará el evento que llevará a cientos de fanáticos y celebridades de todos los Estados Unidos.

Volviendo al tema de la pelota. Los Bombarderos del Bronx es uno de los clubes que tiene mejor cuerpo de pitcheo abridor.

Cada uno de ellos tiene una característica bastante importante que prevalece sobre el resto de sus colegas de otros clubes.

Los mejores brazos de los Yankees se dividen en cada uno de los departamentos

Jameson Taillon marcha como líder en victorias (8-1),  en efectividad la batuta la lleva el cubano Néstor Cortés (1.94) y los ponches son de Gerrit Cole (91).

Por lo que no es para nada malo los numeritos que lleva cada uno ellos, su aporte ha sido fundamental para que estos estén en el liderato de todas las Grandes Ligas sin quitarle mérito al cuerpo de bateadores que también anda muy bien.

“Los cinco tiene posibilidades de ir al Juego de Estrellas, sus números son geniales”, destacó el piloto de la nave de Manhattan.

Que un equipo lleve a todo su cuerpo de pitcheo o a la gran mayoría de sus abridores hace que el trabajo que se está haciendo puertas adentro del club house es bastante importante.

Sin embargo, un descanso no caería mal y esto Jameson Taillon lo tiene muy presente.

“Ya he reservado algunos planes All-Star (para los Hamptons), así que no sé si realmente lo estoy esperando o no”, dijo Taillon, “pero definitivamente sería un gran honor”.

El estrés sometido cada año en cada uno de los jugadores de los Yankees es muy alto. Tomar un descanso para que estos tenga un segundo aire en la segunda mitad de los 162 juegos mínimos es fundamental para el completo desarrollo de lo planeado.

Rendido ante sus muchachos

Se sabe que Aaron Boone no es un mánager muy perfeccionista, no es el típico arrogante de la vieja escuela sino todo lo contrario es un tipo que se puede contar para seguir creciendo dentro de los diamantes de juego.

“Lo que han hecho aquí en más de 60 juegos, la consistencia que han tenido, ha sido una racha realmente notable para ellos. Ha sido divertido verlos tomar la pelota y darnos el tipo de salidas que tienen una y otra vez”, agregó en una entrevista para la AP.

De todos modos es muy complejo que vayan todos. Máximo serían dos, Boone no tiene problemas y mucho menos sus jugadores, tampoco se cree que los fanáticos podrían molestarse en que estos vayan a dominar el Dodger Stadium.