¿Quién no ama a sus mascotas? ¿Y a quién no le gusta el Rey León?
Los Marineros de Seattle echaron mano de estas dos premisas irrebatibles para atraer más aficionados a su estadio, el T-Mobile Park, y hacerlos vivir una divertida experiencia con sus perritos mientras disfrutan de un juego de Grandes Ligas.
Se trata de la Simba Cam (Cámara Simba) llamada así en honor al personaje de la película El Rey León, y que recrea la famosa escena cuando Rafiki levanta al cachorrito en el peñasco, en un ritual de presentación ante los animales de la selva.
La divertida experiencia tiene lugar en la promoción conocida como Bark at the Park (Ladridos en el estadio), cuando a los fanáticos se les permite entrar con sus perros al parque por 10 dólares adicionales.
En los descansos entre innings, los fans que han llevado consigo a sus perros se preparan para escuchar por los altavoces la canción El Círculo de la Vida, del Rey León. Esa es la señal de alerta.
A continuación los fans comienzan a levantar a sus mascotas tal como en la película, hasta que “¡pum, mira, mira, ahí estamos!”, los camarógrafos que transmiten el encuentro comienzan a mostrar en las pantallas gigantes del parque a los fanáticos con sus mascotas en ascuas.
Los perritos, claro, ponen cara de no entender mucho de que va el asunto, pero sus dueños ríen y gozan tremendamente de la acción, y también lo hacen los otros miles de asistentes al parque, que lanzan exclamaciones de alegría y ternura mientras la Simba Cam proyecta sus imágenes.
Es una variación de las exitosas y ya tradicionales Kiss Cam -donde las parejas que aparecen en pantalla se besan- o la Dance Cam, cuando quienes son enfocados se lanzan en divertidos bailes desde sus asientos en las gradas.
La idea también ha sido es puesta en práctica en otros estadios y otras disciplinas con igual éxito; aunque en medio de la alegría, algunos prefieren levantar sus cervezas, sus amigos e incluso sus pequeños hijos.
Al animar a sus fanáticos a llevar sus mascotas al parque, los Marineros le recuerdan tomar en cuenta que sus mascotas estén acostumbrados a socializar o compartir con grupos de personas.
También recomiendan hacer con cuidado el movimiento de levantar a los animalitos, pues a algunos podría no gustarles o sentirse inseguros.
Este es otro éxito que los Marineros se anotaron con las mascotas, pues incluso ellos mismos adoptaron una que permanecía en un refugio.