Es posible que ningún jugador iguale la producción de Rickey Henderson en las rutas base. Sin embargo, esta temporada, Starling Marte les ha recordado a los fanáticos de los Atléticos lo que la velocidad puede aportar a una ofensiva.
Se necesitaron 19 juegos luego de un canje del 28 de julio de los Marlins por Marte para convertirse en el líder en robos de Oakland en 2021, pasando a Ramón Laureano (12 robos en 88 juegos) sin ser atrapado en 13 intentos. Marte desde entonces se ha robado 11 bases en 12 intentos.
Oakland entró en el debut de Marte el 29 de julio con un récord de 13-19 en los 32 juegos anteriores, con un promedio de 4.13 carreras en ese lapso. Los Atléticos tienen marca de 15-16 desde entonces son el 10mo equipo con mas carreras en MLB. Se robo 23 bases seguidas antes de ser capturado ayer.
Con la métrica FanGraphs para correr de base (Base Running Runs Above Average, o BsR), que convierte los robos, atrapado robando y otras jugadas en carreras por encima o por debajo del promedio, Marte lidera la liga con 11.2. La mejor temporada de BsR de Henderson fue 14.0, en 1983 con Oakland, y registró 8.8 o mejor en ocho de 25 temporadas.
El porcentaje de bases robadas de Marte es 90.0% esta temporada (45 de 450 en total) y 78 en su carrera. El SB% de carrera de Henderson es 81. El promedio de MLB de 2021 es 75.5%; fue del 68% durante la carrera de Henderson, según baseball-reference.com. Esta es la segunda temporada (2020 fue la primera) en la historia de la MLB en la que SB% está por encima del 75%.
Más allá de los robos, Marte estaba tomando una base extra (yendo de la primera a la tercera o de la segunda a casa con un sencillo, anotando desde la primera con un doble) en el 86% de las oportunidades con Oakland en comparación con el promedio de MLB de 40%. El porcentaje de carrera de Marte de 55 coincide con el de Henderson.
Marte necesita 1,118 robos para igualar el récord de todos los tiempos de Henderson en la MLB, y está en camino de establecer el récord en 2061. En el corto plazo, los fanáticos de los Atléticos disfrutan del impulso ofensivo.