Los Dodgers de Los Ángeles, si bien tienen una capacidad increíble de pelea actualmente en las Grandes Ligas, cuentan con un detalle más que desastrozo en la actualidad y es el haber confiado en un brazo como el de Craig Kimbrel, que sí, es uno de los más temidos para la rotación de los de Los Ángeles, pero hay que saber cuándo es el momento perfecto para ponerlo y no, no precisamente es un hombre para sacarlo a salvar un partido de pelota, lección aprendida por el manager Roberts.
Recientemente, Craig Kimbrel se subió al morrito en una de las series que veía su club en contra de los Piratas de Pittsburgh y sí, a pesar de ser una persona consistente en el juego, resultó ser que de ir ganando el partido por 5-4, terminó cargando con la derrota del cotejo 6-5 para mal momento de los suyos, además de que, en esta posición donde debes de tener prácticamente frío en la mente, estamos hablando de que tanto él con sus lanzamientos certeros como la defensiva debe responder.
De la gloria al desastre.
Un inicio del mes de mayo en donde se registraba como uno de los mejores en el apartado de efectividad para él, nada más en unos pocos días terminó llevándolo “del cielo al infierno”, ya que, al tener al inicio una efectividad de 1.80 no dejando pasar absolutamente nada por la primera base como lejos, lanzando 5 entradas, 4 hits y una carrera. Ahora el desastre llegó a la ciudad donde en las últimas diez entradas de labor llegó a tener una efectividad de 6.30 con 11 hits, 7 carreras permitidas y una regalía de boletos de 6.
Sin embargo, es de acotar que ha jugado 16 partidos de los cuales solamente en este se ha perdido la oportunidad de salvamento, ya que en lo otros ha tenido el quite de entrar 5 veces en calidad de relevista y las otras ha sido para colocar el cerrojo fuerte y claro de que él es quien tiene el poder para saber el dominio monticular.
Ahora bien, el detalle está en tener en consideración, cuánto tiempo está disputo Dave Roberts a tolerar la situación de montarlo en estos escenarios dada la noticia de que su cerrador clave, Blake Treinen está lesionado y todo apunta a que él no estará para otro momento de la temporada que no sea después del juego de estrellas, el cual ya estará por celebrarse el próximo 19 de julio justamente en la ciudad de Los Ángeles, específicamente en el Dodger Stadium, que, desde que se juega este partido es la segunda vez que funge como sede.
Kimbrel hasta el año pasado registró un número de 23 innings lanzados en 24 apariciones y 1 salvamento en oportunidades que se le han concedido.