Dave Roberts lo sabe, está consciente que el manejo errado del pitcheo le puede pasar factura y una temporada épica como esta de 2022, se puede ir por la borda en cuestión de días, si el área de lanzadores no responde en la postemporada.

Pocos lo dudan, los californianos lo tienen todo para llegar a la Serie Mundial otra vez y a la presencia de Clayton Kershaw y Julio Urías se le añade la consistencia de Tony Gonsolin y la de un sorprendente Andrew Heaney, pero en el otro lado de la balanza, el veterano Craig Kimbrel es la gran interrogante para Roberts y sus muchachos.

La estela de Kimbrel

A sus 34 años, Kimbrel ha debido luchar con numerosos altibajos en esta campaña, su primera con Dodgers, luego de no tomar un segundo aire en el South Side con los Medias Blancas de Chicago.

Todos coinciden que la confianza exagerada de Dave Roberts en Kimbrel ha sido el plus favorable para el 8 veces All Star, quien debió sobrellevar una pérfida racha de cinco salidas bien malas entre el 4 y el 16 de agosto, en las que permitió 4 carreras limpias en 4,1 tramos de labor.

En ese entonces, a pesar de las críticas y los cuestionamientos, Roberts mantuvo a Kimbrel como el hombre de atrás y surtió efecto, pues de a poco, el serpentinero se fue recuperando hasta lograr hilvanar un importante período de 9,1 entradas sin carreras, con 10 juego salvados y un solo hit permitido, además de rebajar su efectividad a 3,73; tal como lo cuentan MLB.com y Los Ángeles Times.

Los fantasmas del pasado

Y todos hablaban de renacer, pero este miércoles, otra vez emergieron los espectros del pasado y Kimbrel volvió a fallar en entradas extras frente a los Diamondbacks, permitiendo un cuadrangular y cargando con otra derrota; ello a pesar de mostrarse sólido con su bola rápida, la misma que sostuvo en el rango de las 96 millas por hora.

“.. Será el hombre…”- reiteró Roberts a los medios y sí, los Dodgers tienen 98 victorias y es casi seguro que superaran las 110 y en Play Off pudieran llegar sin problemas a la Serie de Campeonato y allí, quizás en un duelo revancha ante los Bravos de Atlanta, la historia se volvería a torcer, siempre con Craig Kimbrel jugando un rol protagónico a pesar de las dudas.

El tiempo y el terreno dirán, pero es un hecho que el destino de la organización más dominante en la última década de MLB, depende de un veterano lanzador que busca reencontrase con su mejor versión.