Los fanáticos de Chicago White Sox esperan mucho de Eloy Jiménez, demasiado diríamos.
Antes del cierre patronal en curso, Jiménez enumeró su objetivo número uno para la próxima campaña: “Volver a ser Eloy”. Eso sería un gran impulso para un equipo de Medias Blancas que gano la División Central de la Liga Americana a pesar de la ausencia/caída de Jiménez en 2021.
Aquel chico firmado en 2013 por Chicago Cubs con apenas 16 años por un bono de $2.8 millones de dólares, llego vía cambio a Chicago White Sox, quien enviaba a José Quintana a sus vecinos de ciudad.
En 2018 quemó los niveles AA y AAA, bateando .337/.384/.577 con 22 cuadrangulares y 75 carreras impulsadas en 108 juegos.
Aun en las menores firmó un contrato histórico, pues no había jugado nunca en las ligas mayores, recibiendo $43 millones de dólares.
Eloy debutó en 2019, luego de mucha promoción en torno él, pues era el prospecto número uno de Chicago White Sox en 2019, según MLB Pipeline. En su primera temporada bateo .267/.315/.513 con 31 cuadrangulares y 79 carreras impulsadas en 122 juegos, finalizando cuarto en la lucha por el premio Novato del Año.
En 2020 mostró a todos de qué se trataba toda esa atención y los bombos publicitarios desde las menores, durante la campaña acortada por la pandemia bateó .296/.332/.559 con 14 cuadrangulares y 41 carreras impulsadas en 55 juegos de temporada regular. Si extrapolamos estos números a una temporada completa de 162 parridos, tendríamos 41 cuadrangulares y 121 carreras impulsadas, una producción de nivel MVP.
En 2021, en un partido de los entrenamientos primaverales, intentado atrapar un batazo de jonrón sobre la cerca, chocó contra la pared y se rompió el músculo pectoral izquierdo. Dicha lesión le provocó cuatro meses fuera, sin dudas menos de lo proyectado.
Eloy regresaba a jugar en las mayores en julio, en 55 partidos bateo .249/.303/.437 con 10 cuadrangulares y 37 carreras remolcadas. Sus 10 cuadrangulares fueron la cuarta mayor cantidad del equipo en la segunda mitad de temporada y fue segundo en carreras remolcadas detrás de José Abreu.
El desgarro del tendón pectoral del año pasado fue obviamente la peor lesión para el toletero de 25 años, pero no fue la primera en sacar a la estrella de la alineación de los Medias Blancas.
Las desventuras anteriores en los jardines hicieron que la gente se riera o se estremeciera en las redes sociales, y también envió a Jiménez a la lista de lesionados. A menudo, marcará la línea entre su bien establecido sentido del humor y el tipo de juego de campo que hace que todos contengan la respiración.
¿Será el 2022 el gran año de Eloy Jiménez?
De concretarse un acuerdo entre las partes y culminar el cierre patronal, Jiménez jugará su temporada del 2022 con 25 años de edad y cuarta campaña en las mayores.
Los fanáticos de los Medias Blancas saben de lo que es capaz Jiménez. Están más interesados en saber con qué frecuencia estará disponible para hacerlo.
Para el 2022, ZiPS le proyecta una línea porcentual de .276/.319/.510, con 26 cuadrangulares y 80 remolcadas y 56 anotadas en 112 partidos.
Eloy que apenas ha jugado 232 partidos en la gran carpa, busca mantenerse en el terreno de juego y empezar a demostrar que las proyecciones en torno a él eran reales. De ser así, tendremos otro dominicano dando de que hablar en las mayores.