“… Necesitamos una chispa…”- expresó Gerrit Cole luego del juego del lunes, al ver como los Yankees se sumían en un vacío colosal frente a los Rays de Tampa a pesar de haber lanzando una joya de pitcheo, 6 entradas, 5 hits, 1 carrera y seis ponches.

El as de la rotación de los Bombarderos del Bronx se mostró preocupado al ver la dinámica mostrada por el elenco del Bronx esa noche, 12 ponches, mala defensa en particular de Aaron Hicks y cero perspectivas de victoria.

Cole habló del lunes, pero este martes la historia fue similar, el guion siguió la misma pauta, los Yankees volvieron a perder 3-1, igual sin mostrar nada en la ofensiva, pero fue el martes, antes el lunes, pero el fin de semana ante Boston y en los últimos diez partidos, los Mulos se han mostrado como un equipo bien pequeño, la antítesis de esa escuadra invencible de la primera mitad.

La crisis

Los Bombarderos han perdido 9 de los últimos diez juegos y con una racha de 7 y 15 han ido en picada después del Juego de Estrellas, sin espíritu alguno y carentes de argumentos para responder a las diferentes situaciones del juego.

Y Gerrit Cole habló claro, el equipo está necesitado de un cambio y si bien Giancarlo Stanton y DJ LeMahieu se encuentran a punto de regresar, ni Aaron Hicks, ni Gleyber Torres ni el bullpen dan señales de vida, con Anthony Rizzo mirando desde la banca y Estevan Florial clamando por una posibilidad en triple A.

La chispa

Un punto de quiebre se impone, lo dijo Cole, pero lo saben todos y es ahora, pues con cuatro partidos por jugar ante los Azulejos de Toronto, un elenco mucho más competitivo que los Yankees en estos momentos, además de par de encuentros a comienzos de la semana entrante frente a los Mets, de no romperse la inercia, podría ser peor, mucho más si se confirman a Jacob DeGrom y a Max Scherzer para subir a la lomita del Yankee Stadium.

Al menos una división de honores se vuelve necesaria, es decir ganar al menos tres partidos, pues de no ser así y continúan las mismas pautas, las cosas irían a peor y hasta la clasificación podría estar en veremos, pues el impacto psicológico juega un papel primordial en un contexto como este.