Un año antes, en 2003, en el onceno inning del séptimo juego de la Serie de Campeonato de la Liga Americana, Aaron Boone, castigó a Tim Wakefield con largo cuadrangular y liquidó las aspiraciones de los Medias Rojas de Boston de regresar a la Serie Mundial.
En ese 2004, en octubre, todo apuntaba a que la historia se iba a repetir, cuando Yankees y Boston volvieron a verse las caras en una instancia similar y los Mulos comenzaron ganando los dos primeros juegos en el Bronx.
Los hechos
Los Yankees llegaron a Fenway y tal parecía que la “Maldición del Bambino” seguiría subsistiendo en el tiempo, pues los Bombarderos se llevaron también el primer juego en Boston y llegaron al cuarto ganando 4 a 3, a solo 3 outs de una escandalosa barrida, pero en ese noveno capítulo cambiaría la historia, después que Bill Mueller, le pegara sencillo al jardín central a Mariano Rivera para empatar el duelo.
Minutos después aparecía él, David Ortiz, ya en la Serie Divisional ante los Angelinos de Anaheim, había soltado un decisivo jonrón de 2 carreras e el décimo inning, para decidir el juego y con ellos el pase a la Serie de Campeonato; tal como lo reseña MLB.com.
El nacimiento de la leyenda
El dominicano había llegado a los Red Sox proveniente de los Mellizos de Minnesota y estaba forjando su leyenda a golpe de batazos, pero ese día, un 17 de octubre, en el inning 12, luego de que Manny Ramírez abriera la entrada con sencillo, David Ortiz disparó un soberano cuadrangular para también definir ese cuarto partido y plantar de este modo la bandera de la histórica remontada.
Con el paso del tiempo, muchos coinciden, tal como dictan los hechos también, que esa noche en Fenway Park nacía la leyenda de David Ortiz, “El Big Papi” que todos conocemos hoy, el miembro del Salón de la Fama.
La trascendencia
La estadística también refiere, que, en ese momento, el dominicano se convirtió en el primer jugador en la historia de Grandes Ligas en conectar 2 Walk Off en una misma postemporada.
Los Medias Rojas terminarían aplastando a los Cardenales de San Luis en la Serie Mundial y con el éxito comenzaría un nuevo período de gloria que llevaría a la organización a ganar los anillos en ese 2004, también en 2007, así como en 2013 y 2018.
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