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Por primera vez en la historia de las Grandes Ligas, un cuadro interior completo compuesto únicamente por peloteros dominicanos fue alineado por los Rojos de Cincinnati, en un hecho que evoca la histórica alineación de los hermanos Rojas Alou y reafirma el peso de la República Dominicana en el béisbol mundial.

En el béisbol, los números cuentan historias, pero hay días en que los nombres lo dicen todo. El pasado fin de semana, los Rojos de Cincinnati —la franquicia más antigua de las Grandes Ligas— marcaron un hito en la historia del deporte al alinear a cuatro jugadores dominicanos como titulares en su cuadro interior. Jeimer Candelario en primera base, Santiago Espinal en la segunda, Noelvi Marte en la tercera y Elly de la Cruz en el campocorto formaron una muralla criolla, un símbolo vivo del impacto profundo y permanente de la República Dominicana en el béisbol.

Este hecho, inédito para el club y raro en la historia de las Grandes Ligas, despierta una serie de reflexiones sobre el rol que los peloteros dominicanos han tenido en la evolución del juego, desde las hazañas de Juan Marichal y Pedro Martínez, hasta el fenómeno cultural que representa hoy Elly de la Cruz.

Una hazaña que conecta generaciones

Para dimensionar el momento, hay que remontarse a 1963, cuando los hermanos Felipe, Mateo y Jesús Rojas Alou hicieron historia al conformar, por primera vez, un trío de jardineros de un mismo país no estadounidense con los Gigantes de San Francisco. Aquella fue una alineación que hablaba de hermandad, orgullo y ruptura de barreras raciales y geográficas en un deporte que, por mucho tiempo, se resistió a abrir sus puertas.

Más de 60 años después, lo que se vivió en el Great American Ball Park fue más que una casualidad técnica: fue una alineación cargada de simbolismo. Los cuatro dominicanos no solo estuvieron en el terreno; fueron protagonistas en los triunfos ante los Piratas de Pittsburgh. Elly de la Cruz conectó un grand slam decisivo el sábado 12 de abril, y al día siguiente, Santiago Espinal fue clave con el bate y el guante.

Dominicanos Jays: el precedente más cercano

Aunque no es la primera vez que un equipo presenta una alta concentración de talento dominicano, el caso de los Rojos resalta por haber logrado una formación completa en el infield. En 2014, los Azulejos de Toronto saltaron al terreno con siete dominicanos en la alineación titular. Aquel equipo, apodado popularmente como los “Dominican Jays”, incluyó nombres de peso como José Bautista, Edwin Encarnación, José Reyes, y Melky Cabrera. Incluso contaron con Esmil Rogers como lanzador en ese encuentro ante Boston.

Sin embargo, Toronto no logró lo que Cincinnati ahora puede reclamar con orgullo: un cuadro interior íntegramente dominicano.

Más que un momento, una declaración

Lo ocurrido en Cincinnati va más allá de la estadística. Es una afirmación de la riqueza del semillero dominicano, que continúa produciendo talento de élite pese a los desafíos sociales, económicos y estructurales que enfrentan muchos jóvenes jugadores en la isla. El béisbol es, para muchos, una ruta de escape, una promesa de redención. Y cuando esos sueños se alinean en el diamante, el resultado puede ser tan potente como una alineación histórica.

Los dominicanos en MLB ya no solo son estrellas aisladas; son estructuras clave dentro de las franquicias. Francona lo entendió al apostar por estos cuatro jóvenes para defender el corazón del terreno. Su respuesta no fue solo buena defensa y producción ofensiva, sino un testimonio de cohesión y excelencia.

La historia sigue escribiéndose

Este cuadro dominicano en Cincinnati es una página gloriosa en la historia del béisbol latinoamericano. Cada vez que uno de estos peloteros pisa el terreno, lo hace con el peso de la herencia y la esperanza de toda una nación. Lo que hicieron Candelario, Espinal, Marte y De la Cruz no es solo un récord; es una inspiración para los miles de jóvenes que, con guantes viejos y pelotas de trapo, sueñan con llegar a las Grandes Ligas.

La República Dominicana sigue demostrando que, cuando se trata de béisbol, es mucho más que una cantera: es un pilar esencial en el alma del juego.

MLB