Según pasa el tiempo, la modernización del béisbol se hace una realidad cada año y esto trae consigo un modelo de jugadores significativamente muy diferente a lo que los fanaticos de las décadas pasadas estaban acostumbrados a ver.
“El juego cambio”, es una de las frases y términos mas empleados en los últimos tiempos cuando nos referimos al deporte del bate y la pelota. El béisbol sigue siendo de 9 entradas, 27 outs, 4 bases y 9 jugadores en el campo, lo que si ha cambiado ha sido la mentalidad y la forma de ejecutar el juego de los protagonistas que se encargan del show en el terreno.
Uno de los modelos más atractivos y excitantes que se ha ido perdiendo según avanza el tiempo, ha sido el del jugador “pimentozo”, que roba bases, toma grandes turnos, conecta muchas líneas y que tradicionalmente tiene un carisma que conecta con el fanatico y esto le da un plus extra a su forma de juego.
De los pocos jugadores que podemos ver hoy en día con este modelo, tenemos al talentoso jugador del cuadro de los Marlins de Miami, Jazz Chisholm Jr. que en poco tiempo se ha robado el corazón de la afición en Miami y de todo el béisbol en general.
Jasrado Hermis Arrington Chisholm Jr. (Jazz) nació en Nassau, Bahamas en 1998 y debutó en grandes ligas en enero del 2020. En un poco más de 150 juegos en su carrera ha mostrado una defensa por encima del promedio, especialmente en la intermedia y en ocasiones en el campocorto.
El electrizante jugador además de sus grandes herramientas en el terreno es muy carismático y una muestra de esto es su gran frecuencia en las redes sociales, compartiendo y contestándole a fanaticos especialmente en su cuenta de Twitter.
En la actual temporada, Chisholm lidera las grandes ligas en SLG con .800 y el encasillado de triples con dos, empatado con varios. Ha conectado 4 cuadrangulares, ha remolcado 15 carreras -top cinco en remolcadas- y presenta promedio de .325, que junto al dominicano Jesús Sánchez (.340) lideran en promedio de bateo y SLG dentro de los Marlins.
Este puede ser esa clase de jugador que le cambia la cara a una franquicia y si hay un equipo que necesita un “show man” para atraer a los fanaticos y ayudar a ganar partidos, son los Marlins de Miami.