Él disparó una bomba nuclear esta noche’: con un solo swing. Bryson Stott, un bateador paciente, ha trabajado más en el swing al principio del conteo. No perdió tiempo el miércoles con un grand slam que le puso en el libro de récords.
Bryson Stott conecta un grand slam en la sexta entrada del Juego 2 para darle a los Filis una ventaja de 7-0 sobre los Marlins.
El miércoles por la noche, Trea Turner vio al tercera base de los Marlins, Jake Burger, cometer un error en un roletazo de Nick Castellanos que llenó las bases con un out en la sexta entrada. Se volvió hacia sus compañeros de equipo en el dugout de los Filis .
No pasó mucho tiempo. En el siguiente turno al bate, Bryson Stott se acercó al plato y hizo swing al primer lanzamiento que vio, una bola rápida hacia arriba y hacia adentro. Aterrizó 412 pies en las gradas del jardín central derecho y le dio a los Filis una ventaja de 7-0.
Golpeó su bate contra el suelo, al estilo de Rhys Hoskins . Dijo que se desmayó. No recordaba el ataque del bate, ni su swing, ni correr por las bases. Y qué momento fue. Stott fue apenas el segundo Filis en conectar un grand slam en postemporada, uniéndose a Shane Victorino, quien conectó uno en el Juego 2 de la Serie Divisional de la Liga Nacional de 2008. La explosión de Stott efectivamente envió a su equipo a Atlanta para enfrentar a los Bravos en la NLDS, que comienza el sábado.
Pero para muchos de sus compañeros y entrenadores sentados en el dugout, también fue un recordatorio de lo lejos que ha llegado Stott como bateador.
El segunda base de 25 años es conocido por su paciencia. Stott realiza muchos lanzamientos, por lo que sus compañeros pueden ver muchos de sus lanzamientos. Pero en los últimos meses, el entrenador de bateo Kevin Long lo ha alentado a atacar temprano cuando ve el lanzamiento correcto. Es algo que Turner, Nick Castellanos y Bryce Harper hacen muy bien.
Según Baseball Savant, Harper hace swing en el primer lanzamiento el 47,5% del tiempo, lo que ocupa el segundo lugar en el béisbol. Castellanos lo hace el 47,4% de las veces, con lo que ocupa el cuarto lugar. Turner lo hace el 39% de las veces, ubicándose en el puesto 22.
Esta temporada, Stott solo ha hecho swing al primer lanzamiento el 16,3% del tiempo, que es el octavo porcentaje más bajo del juego.
Esa no fue la única señal de crecimiento. Stott también conectó ese grand slam con una bola rápida, un lanzamiento que se le escapó en 2022. Bateó .209 contra bolas rápidas la temporada pasada. Miró películas durante toda la temporada baja e hizo algunos ejercicios de salida con una mano y movimientos con un brazo para asegurarse de que estaba usando su mano dominante (izquierda).
También comenzó a andar sin ritmo a mitad de la temporada pasada, lo que le ayudó a ver la pelota por más tiempo y lo colocó en una mejor posición para batear. Todo ese trabajo ha dado sus frutos.
A veces es fácil olvidar que Stott tiene apenas 25 años y está en su segunda temporada completa. Long y Turner dicen que es maduro para su edad, y su capacidad para estar a la altura del momento el miércoles habla de ello. Pero de vez en cuando, también sienten la necesidad de burlarse de él.