Con lagrimas en sus ojos, así estuvo David Ortiz durante su visita al Salón de la Fama de Cooperstown, para cerrar el ciclo de su tour que lo prepara para su exaltación en el próximo mes de julio.
“¡Papi! ¡Papi!”
Así fue recibido en la Galerías de Placas, aquel jugador que de niño soñaba con jugar béisbol y ser parte del nicho de los inmortales. Dicho sueño está a punto de volverse realidad y Ortiz indicó que se siente como en casa dentro del lugar que acoge a los mejores jugadores de la historia.
“La fiesta apenas empieza”, señaló Ortiz.
Ortiz de 46 años fue elegido al Salón de la Fama en su primer intento con el 77.9% de los votos que emiten los escritores de la Asociación de Escritores de Béisbol de Estados Unidos (BBWAA), siendo el 58vo jugador elegido en su primer año en la boleta.
“Ha sido un largo camino, sabes lo que quiero decir. Estar en esta sala, es mi primera vez. Se me pone la piel de gallina porque, como niño, es como estos tipos en esta sala, los miras y te quedas como ¡guau! Es algo difícil de imaginar teniendo en cuenta de dónde vengo”, dijo Ortiz.
En su carrera de 20 temporadas en las mayores, que se dividió entre los Mellizos de Minnesota y los Medias Rojas de Boston, fue seleccionado 10 veces al Juego de Estrellas de las Grandes Ligas, todos con Boston y ganó siete bates de plata, quedando cinco veces dentro del top cinco de los finalistas al premio Jugador Más Valioso. Conectó 541 cuadrangulares y remolcó 1768 carreras, mientras tuvo línea ofensiva de .286/.380/.552.
“Los mejores jugadores de la historia de este deporte están acá. Es un gran cumplido. Todavía no me lo puedo creer. Todavía no puedo creerlo”, comentó Big Papi.
Ortiz fue el protagonista principal del mayor regreso de la historia de los deportes profesionales de Estados Unidos, donde Boston les regresó a sus rivales de división, Yankees de New York, luego de estar abajo en la serie 0-3. También formó parte de los equipos campeones de 2007 y 2013, siendo elegido Jugador Más Valioso de la Serie Mundial en 2013.
“Sé que lo que hice en el campo de juego para ganar campeonatos y representar a Boston, ha funcionado”, comentó Ortiz.
El 24 de julio, Ortiz se convertirá en el cuarto miembro del Salón de la Fama nacido en la República Dominicana, uniéndose a Juan Marichal, Pedro Martínez y Vladimir Guerrero.
Ortiz contó que empezó a pensar en el Salón de la Fama de Cooperstown luego que conectó su cuadrangular 400 en la temporada 2012.
“Una vez que llegué a mis 400, alguien tuvo una conversación conmigo sobre eso y yo estaba como, ‘Hmm. Déjenme tratar de cuidarme mejor, a ver si puedo llegar allí'”, comentó. “Fue entonces cuando empecé a prestar atención”, dio a conocer Ortiz.
Ortiz fue reclutado por los Marineros de Seattle en 1992, estuvo en las ligas menores del equipo durante tres años y fue enviado a los Mellizos de Minnesota a cambio de Dave Hollins, con quienes jugó durante seis temporadas, pasando a los Medias Rojas de Boston en una decisión que cambio el rumbo de la historia del jugador y del equipo.