Los Yankees de Nueva York siguen siendo el mejor conjunto en este 2022 dentro las Grandes Ligas después de sumar más de 60 éxitos antes del parón por el All-Star Game, únicos al iniciar la jornada de este sábado.
El plantel de Aaron Boone no solo es el mejor por su récord de victorias y derrotas, sino también por el rendimiento de sus jugadores, muchos de los cuales han regresado a los planes estelares después de algunos años de bajo rendimiento.
Entre los jugadores que han reencontrado su acostumbrado rendimiento se encuentra el jardinero Giancarlo Stanton, el juez Aaron Judge y el camarero venezolano Gleyber Torres.
Antes de saltar al terreno frente a los Boston Red Sox, Gleyber exhibe promedio de bateo de .273 con 14 bambinazos, 40 carreras impulsadas, 43 anotadas mientras su línea ofensiva se encuentra en (.330 OBP/ .493 SLU/ .823 OPS).
Durante las últimas dos temporadas el natural de Caracas tan solo pudo despachar 12 cuadrangulares en más de 160 encuentros mientras su OPS en ambas campañas quedaba por debajo de la media de su joven carrera.
Al iniciar los entrenamientos Gleyber y los Yankees llevaron a cabo conversaciones sobre su forma de batear y como erradicar estos errores, y sin dudas le va dando buenos resultados. El entrenador de bateo Dillon Lawson también señaló esa la razón por la que Torres ha sido más productivo con respecto a las dos temporadas anteriores.
“Gleyber alcanzó un cierto nivel e hizo lo que hizo en el 2018 y 2019. En un esfuerzo por mejorar en general, diría que probablemente sin querer, para tratar de abrir más partes al campo como cortar su giro de pierna y se volvió menos”, expresó Lawson. “Sabemos que así es como crea la velocidad del bate. No todo el mundo necesita lo mismo y lo que Gleyber necesita no funciona para todos, pero funciona para él”.
“Ha creado una forma en la que todo se sincroniza y el tiempo está profundamente arraigado para que no tenga que pensar en ello. Si lo acelera o hace demasiado más, no le ayuda. En realidad duele. Así que queremos que se sienta cómodo porque es lo que lo hace ser quien es”.
“Los lanzadores hicieron ajustes y probablemente tardó en adaptarse a ellos, pero se puede ver la diferencia este año, desde el hecho de que ha sido bastante bueno en la segunda base, por lo que no tiene eso en mente, hasta el hecho de que es un bateador más experimentado y ha recogido y aprendido de algunas de las caídas que pasó antes”.
Hasta el momento el mes de julio va siendo el más productivo para el venezolano al registrar promedio de .396 con un cuadrangular, 8 carreras impulsadas y línea de bateo fijada en (.463 OBP/ .563 SLU/ 1.026 OPS).