De llegar como una superestrella y con uno de los contratos más caros en la historia de las Grandes Ligas, a irse por la puerta de atrás de los Cachorros de Chicago.
Jason Heyward ya no verá acción con el uniforme de los Cubs en lo que resta de temporada por una lesión en su rodilla y la franquicia dio finalizada la contratación del jardinero, quien tenía acuerdo con el equipo hasta 2023.
El gerente general de los Cachorros, Jed Hoyer, informó que el guardabosque ya no será parte de la organización para la venidera campaña de Las Mayores.
“No lo tendremos con el equipo la próxima temporada. Ya hablamos con él al respecto. Le queremos dar todo el receso de temporada para encontrar una oportunidad”, dijo el presidente de operaciones.
Heyward llegó a la novena en 2016, año en que el conjunto de Chicago ganó la Serie Mundial ante los Indios de Cleveland (ahora Guardianes), firmando un contrato por $184 millones de dólares y ocho años. Sin embargo, el pelotero no logró rendir lo que se esperaba, siendo la baja ofensiva su talón de Aquiles, con un promedio de apenas .245 en siete campañas.
El outfielder logró lucir en sus dos primeras temporadas con los Cubs, ganando el Guante de Oro en par de ocasiones entre 2016 y 2017, pero su desempeño fue disminuyendo al pasar los años.
El jugador no cumplió con las expectativas de un jardinero derecho, que llegó desde los Cardenales de San Luis siendo el mejor en su posición y promediando con el madero para .293.
Golpeado por las lesiones
Las lesiones fueron otro factor fundamental para que Heyward no luciera su mejor versión con los Cachorros. “J-Hey” se ingresado a la lista de incapacitados desde el pasado 27 de junio debido a una inflamación en su rodilla derecha.
El jardinero apenas disputó 48 encuentros en la vigente temporada y dejó un average de .204, un jonrón, 10 carreras impulsadas, 15 anotadas, 28 hits y una base robada en 137 turnos al bate.
Chicago aún debe pagarle $22 millones de dólares de lo que resta de su último año de contrato con la franquicia. Una vez liberado, cualquier equipo de la MLB puede negociar con el pelotero.