Ese juego, casi perfecto, con trece ponches fue como una señal de lo que venía y no fue nuevo para Clayton Kershaw, en su carrera ha tenido 66 partidos de 10 ponches o más, ayer solo necesitaba 4.
Y todo se concatenó de la mejor manera; Dodger Stadium y frente a su gente; catorce años después de su primera salida y de su primer ponche en Grandes Ligas, Clayton Kershaw volvió a ser historia.
Y no es un secreto que el estelar zurdo de 34 años, tiene un sitio reservado en lo más alto de Cooperstown pero así y todo sigue tallando su placa con un nivel de perfección sublime, cual Da Vinci o Miguel Ángel.
El instante
Kershaw solo necesitaba 4 ponches para encabezar el listado más que simbólico, pues basta recordar que la marca actual de 2696 databa de 1979 y la poseía el legendario Don Sutton.
Cuarenta y dos años que terminaron en la cuarta entrada del partido de este treinta de abril cuando Clayton ponchó a Spencer Torkelson y el tiempo se detuvo allí encima del box.
La ovación fue total, cerrada y pocos se percataron incluso del momento cuando Austin Barnes recogió la bola y la guardó.
Homenaje
Y los aplausos seguían y Kershaw saludaba a todos incluso hubo un momento en brindó una especie de reverencia, cuatro décadas y se dice fácil, pero cuatro décadas y el tres veces Cy Young dejó atrás a Sutton y a Don Drysdale.
El momento pudo ser en la anterior salida de Kershaw en el Petco Park frente a los Padres de San Diego pero faltaba magia, había una sensación como de vacío, que no llenaba las expectativas y Dave Roberts los sabía.
El manager de los californianos dejó en cinco entradas la faena de su as; cinco entradas y tres ponches y Kershaw ganó igual pero su hito quedó pactado para este fin de semana y cumplió.
Roberts habló a los medios también, tras el juego y comentó que la hazaña hubiera sido especial en cualquier lugar pero en casa tenía su toque particular, más emotivo.
Y el tiempo regresó al mismo lugar y Clayton Kershaw saludó a Don Sutton para seguir con su impresionante historia en Grandes Ligas.