Sam Hilliard dio un salto y realizó una atrapada de otro planeta para denominarse un “Roba jonrones” en las Grandes Ligas, en lo que fue la victoria de los Rockies de Colorado 7-3 sobre los Padres de San Diego.

El jardinero izquierdo de los rocosos apareció en la parte baja de la segunda entrada ante un tablazo del camarero de los californianos Brandon Drury, que conectó bien a la bola, pero fue víctima de la espectacular jugada de Hilliard.

Los Padres buscaban abrir el marcador en el encuentro con uno en circulación, pero fue el outfielder de Colorado les negó esa opción y lució de gran manera en el left field para mantener las acciones sin carreras, hasta ese entonces.

La buena intervención cobraría importancia un inning después, ya que los visitantes tomaron la delantera en el compromiso con doblete impulsor de dos anotaciones de Ryan McMahon.

El mismo camarero se volvería el némesis en el partido para Joe Musgrove y descargó todo su poder por el jardín central del Petco Park para acreditarse un cuadrangular de tres rayitas, colocando la pizarra a 6-0 en la alta del quinto capítulo.

Los dirigidos por Bub Black fabricaron una más en la novena entrada por medio de un sencillo remolcador del cubano José Iglesias y se llevaron la victoria, evitando la barrida ante la escuadra de San Diego.

Entre los destacados

Hilliard fue una de las figuras en el duelo, destacando con una magnífica atrapada en los jardines y también con el madero al duplicar en cuatro visitas al plato con una anotada.

El guardabosque acumula 26 imparables, par de bambinazos, 13 carreras impulsadas, 17 anotaciones, tres bases estafadas y un promedio al bate de .181.