Licey arriba, Águilas abajo

El Round Robin de la Liga Dominicana de Béisbol 2024-25 sigue tomando forma, y lo que vimos este sábado 11 de enero no deja lugar a dudas sobre las tendencias de los equipos. Los Tigres del Licey continúan demostrando su fuerza, consolidándose en la primera posición con una victoria crucial frente a los Leones del Escogido, mientras que las Águilas Cibaeñas, al borde del colapso, sumaron su sexta derrota consecutiva, complicando cada vez más su clasificación.

Licey sigue imparables

El partido de los Tigres frente a los Leones no fue una victoria cualquiera. Fue un triunfo que reafirmó su dominio y fortaleza. Los bicampeones defensores se impusieron por 5-4, y lo hicieron con un toque de sacrificio en el noveno inning por parte de Cristhian Adames, quien, con un out, remolcó desde tercera a Luis Barrera para anotar la carrera que les dio el triunfo.

Lo interesante de esta victoria es que Licey ha mostrado una notable consistencia. Llegan a la mitad del Round Robin con un impresionante récord de 7-2 y una racha de tres victorias consecutivas, sin perder aún como visitantes. Esto no es casualidad. Con un pitcheo sólido encabezado por Brooks Hall y Jonathan Aro, y una ofensiva que se apoya en jugadores como Miguel Andújar, Troy Johnston y Johan Rojas, los Tigres se perfilan como el equipo a vencer. La manera en que han sido capaces de responder en momentos críticos, como lo demostró Adames con su toque de sacrificio, habla de un equipo con la mentalidad de campeón.

Por otro lado, el Escogido, aunque empataron el juego en la novena con un cuadrangular de Sergio Alcántara, no pudieron sostener la ventaja y cayeron ante la garra del equipo azul. Esto deja en claro que Licey no solo tiene el talento, sino también la resiliencia para llevarse los partidos cerrados, algo vital en esta fase del torneo.

Águilas Cibaeñas: ¿Fin de la esperanza?

Si Licey se encuentra en su mejor momento, las Águilas Cibaeñas atraviesan un desierto de derrotas que les ha dejado con un récord lamentable de 1-8. En su enfrentamiento contra las Estrellas Orientales, el equipo cibaeño comenzó con un sólido 5-0 en el marcador, pero no supieron mantener la ventaja. Las Estrellas, lideradas por un grand slam de Abraham Almonte, remontaron con autoridad, dejando a las Águilas con una amarga derrota de 8-7.

Es impresionante cómo las Águilas, con un ataque ofensivo tan potente como el de Harold Ramírez y Wily Peralta en el montículo, se vieron arrolladas por una reacción feroz de las Estrellas. La caída de Peralta en el sexto inning, junto con la falta de control del relevo, permitió que las Estrellas voltearan el marcador y se llevaran el juego. Lo más alarmante para las Águilas es la consistencia con la que se han desplomado en esta etapa del Round Robin, sin poder encontrar la fórmula para romper su racha negativa.

La derrota no solo refleja problemas en el pitcheo, sino también en la capacidad del equipo para ejecutar en momentos cruciales. Si bien han tenido buenos momentos ofensivos, su falta de disciplina en el juego y la inconsistencia de su relevo siguen siendo factores determinantes que los tienen en el fondo de la tabla, con pocas esperanzas de clasificar si no logran un repunte inmediato.

Perspectivas y lo que viene

Los Tigres del Licey, con su sólida racha y su dominio tanto en el bateo como en el pitcheo, se perfilan como los grandes favoritos para llegar a la final. Su balance de 7-2 les da una ventaja considerable sobre los demás equipos, y su capacidad para adaptarse y tomar decisiones clave en momentos decisivos, como lo demostró el toque de sacrificio de Adames, muestra que este equipo tiene la mentalidad de campeón.

En cuanto a las Águilas, la situación parece desesperada. Con una marca de 1-8 y en el fondo de la tabla, las opciones de clasificación parecen cada vez más remotas. A menos que puedan corregir los problemas en su pitcheo y lograr una racha ganadora, este Round Robin podría convertirse en una pesadilla para el equipo cibaeño.

El resto de la semifinal promete emociones intensas. Las Estrellas Orientales, ahora empatadas con el Escogido en la segunda posición, siguen siendo un equipo peligroso que ha demostrado capacidad para remontar y pelear en los momentos más críticos. El escenario está claro: Licey tiene la delantera, pero los demás equipos aún tienen algo que decir, y las Águilas, a pesar de estar en una situación comprometida, todavía pueden sorprender.

Sin duda, el Round Robin está lejos de terminar y, aunque los Tigres parecen imbatibles por el momento, cualquier cosa puede pasar en la Liga Dominicana de Béisbol.