Mike Clevinger tras su cirugía de Tommy John entra a 2022 con la intención de convertirse en un ancla de rotación confiable para los Padres, y el trabajo no es únicamente físico. Clevinger, está ansioso por contribuir en 2022.

La rotación de los Padres cuenta hace una temporada con las incorporaciones de Yu Darvish, Blake Snell y Joe Musgrove. Aparte de Musgrove, los titulares no lograron encontrar el equilibrio durante toda la temporada. Las lesiones devastaron los brazos de San Diego, desde Darvish y Snell hasta Chris Paddack, Adrian Morejon y Dinelson Lamet. Sin embargo, ningún brazo tiene el potencial de impactar la dirección de la temporada 2022 más que Clevinger.

Si puede rendir una temporada completa, después de las cirugías de Tommy John, en plural, equivaldría a una gran adición a la rotación. Cualquiera que pueda estabilizarla luego de una temporada llena de “abridores” y días de bullpen sería invaluable.

Dos cosas han hecho que Clevinger se sienta cada día más cómodo. La primera, la decisión de Preller de firmar a Clevinger con una extensión de dos años, a pesar de quedarse fuera de la mitad de ese acuerdo mientras se rehabilitaba, con la agencia libre asomándose en 2023.

Eso le permitió tranquilizarse y centrarse en su rehabilitación. Lo colocó en el mejor lugar posible para volver y ser lo mejor que pueda. Luego vino la contratación del ex entrenador de lanzadores de Cleveland, Rubén Niebla. Rubén probablemente, por sí solo, tuvo la mayor influencia sobre su desarrollo como lanzador desde que está en el béisbol profesional.

Aunque algunos supondrían que el camino de regreso de un segundo Tommy John indica problemas, Clevinger dijo que en su caso es al revés.

“En realidad ha sido mucho más suave. No sé si es porque sé qué esperar porque he pasado por uno o si son los avances tecnológicos. De cualquier manera, ha sido mucho más suave que la primera vez”.

Clevinger dijo que espera lanzar “a toda velocidad”  la próxima temporada.

Clevinger ha estado a un nivel de intensidad bastante bueno, según el manager de los Padres, Jayce Tingler. El derecho tendrá un lugar en la rotación esperándolo la próxima temporada, y la expectativa es que esté listo para partir desde el primer día.

Tiene la oportunidad de ser la mayor incorporación de la temporada baja para los Padres de San Diego cuando regrese a un lugar en la rotación de titulares.

El jugador de 30 años ha sido nada menos que dominante cuando estaba sano a lo largo de su carrera en la MLB, con marca de 44-23 con efectividad de 3.19, WHIP de 1.19 y 10.0 K/9 en partes de cinco temporadas con Cleveland y San Diego.

Sin embargo, ha lanzado más de 130 entradas en una temporada solo una vez en su carrera, y mostrar cierto nivel de durabilidad podría ser de gran ayuda para impulsar su stock antes de llegar a la agencia libre por primera vez en su carrera el próximo invierno.

Con algo parecido a su temporada 2019 cuando registró una efectividad de 3.02 y un WHIP de 1.16 con 207 ponches en 200 entradas, sería uno de los lanzadores abridores más buscados en un mercado de agentes libres que también incluye a Nathan Eovaldi, Chris Bassitt, Joe Musgrove, Sean Manaea, Taijuan Walker y Zach Eflin.

El derecho de 6 pies y 4 pulgadas lanza una bola rápida de cuatro costuras (94 MPH), un slider  (82 MPH), una bola curva (76 MPH), un cambio (87 MPH) y un cutter (89 MPH).

Como la mayoría de los lanzadores, lo vimos lanzar su bola rápida mucho menos en 2020; aunque sigue siendo su lanzamiento predominante tirándolo el 41 por ciento de las veces en Cleveland. Y vimos aumentó su uso de slider. Quizás eso se debió a que le estaban bateando solo .130  en los Indios para 2020 y .174 en 2019. Y su bola rápida en cambio estuvo siendo menos efectiva.

Debemos tener en cuenta que solo hizo 4 aperturas ese lapso y lanzó solo 22.2 entradas, por lo que el tamaño de la muestra para 2020 es muy pequeño. Pero mejoró sustancialmente en las 19 entradas lanzadas con San Diego ese mismo año, mejorando la efectividad whip y sobretodo el FIP de manera sustancial. Su ERA+ en las 22.2 EL en Cleveland fue de 141, y 149+ en las 19 de San Diego.

Su K% sufrió bajas pero es un lanzador abridor que no dará muchas bases por bolas, que profundizará en los juegos (lanza alrededor de 6 episodios) y salidas de calidad.

Estamos emocionado de ver lo que hace Clevinger de regreso al béisbol con los Padres y si puede resolver su salud.