Si de buenos defensores en las Grandes Ligas en esta época hay que hablar, seguramente el tercera base de los Cardenales de San Luis, Nolan Arenado, tendrá siempre un lugar en esa conversación. Debido a sus capacidades para el fildeo y su poderoso brazo, el hombre que vistió durante 8 campañas la casaca de los Rockies de Colorado es considerado no solo como uno de los mejores jugadores a nivel defensivo en esta época, sino probablemente de toda la historia moderna del rey de los deportes.

Con 9 Guantes de Oro y 5 Guantes de Platino en su haber, queda más que claro que Nado es un prodigio entre los antesalistas, uno de esos que no se ve sino cada mucho tiempo. Parte de eso volvió a quedar demostrado hoy cuando en el triunfo de sus Cardinals sobre los Nacionales de Washington por pizarra de 6×2, volvió a mostrar sus increíbles dotes como custodio de la esquina caliente.

Jugada de altura

Había hombres en segunda y tercera base y 2 outs en la pizarra cuando en la parte baja de la séptima entrada llegó el turno de batear para el dominicano Víctor Robles. En conteo de cero bolas y un strike este sacó un machucón corto por terrenos de la raya de la antesala y parecía que se apuntaría infield hit y carrera impulsada, pero nada parecido.

Nolan Arenado atacó la bola y con la mano limpia realizó un tiro prolijo a la primera almohadilla para poner fuera al bateador/corredor de turno y así finalizar la entrada. ¡Digno de aplaudir de pie lo hecho por Sandblaster!