La llegada del fenómeno japonés Shohei Ohtani a las Grandes Ligas revolucionó a todos los fanáticos que por mucho tiempo estuvieron en busca una nueva inspiración para no desprenderse ni siquiera por un segundo del Mejor Béisbol del Mundo.
Por lo general es natural poder disfrutar de un jugador con enormes cualidades y talento ofensivo, de la misma forma que no sorprende ver mucho talento en un lanzador, pero lo cierto es que no todos los días se puede disfrutar de un hombre con un swing capaz de enviar la esférica a más de 400 pies y a la vez sube al montículo con rectas sobre las 100 MPH.
Estas condiciones llevaron al jugador de los Angelinos a ganar el premio al Jugador Más Valioso de la pasada temporada de forma unánime, después de disparar 46 bambinazos, remolcar a cien compañeros mientras desde el box sumaba nueve victorias con efectividad de 3.18.
Al observar este espectacular rendimiento muchos se preguntaron, ¿será capaz de conseguir estos números algún otro año?
Si bien es cierto que en el 2022 sus números han quedado un poco por debajo con respecto a la pasada campaña, aún siguen siendo extraordinarios y suficientes para hacer que retenga el MVP.
Los elogios para este jugador llegan desde todas partes y el más reciente fue el manager de los Astros de Houston Dusty Baker, quien estará al frente de las estrellas de la Liga Americana en este All-Star Game 2022.
Baker hace algunas horas expresó: “Me alegro de que esté de mi lado durante al menos un día. Lanzó un gran juego anoche y está mejorando y eso es lo que asusta. El hecho de que estemos en la misma división que él”.
Ohtani el pasado 13 junio enfrentó a los Astros en el Angel Stadium, logrando la victoria tras lanzar seis entradas donde solo soportó una carrera limpia mientras propinaba doce ponches. Por su parte con el madero conectó par de imparables en cuatro turnos con dos remolcadas.
La presencia del japonés junto al estelar Mike Trout ha elevado la calidad del plantel californiano a pesar de esta ubicados en este instante en el cuarto puesto de su división a 20 juegos de la cima.