Fue el hombre que logró armar el mejor equipo y en 2005, 86 años después de aquella Serie Mundial en 1919, acabó con la Maldición de los Medias Sucias y muchos en el South Side y más allá lo veneraron como un rey.

Ozzie Guillén fue el artífice de aquel anillo hace ya 17 años, cuando los Medias Blancas de Chicago lograron someter a los Astros de Houston en el Clásico de Otoño para romper las cábalas y sentar un legado.

El legado

Bajo la égida de Guillén, el grupo liderado por hombres como Orlando Hernández, José Contreras, Freddy García y las leyendas Paul Konerko y Frank Thomas, acabó con un feo precedente que pintaba para durar un siglo.

Desde entonces la estela del venezolano quedó y en la ciudad de los vientos es casi un dios a pesar del paso de los años y quizá por ello, de un modo u otro siempre se ha visto como una especie de tótem sagrado al que se debe volver.

El presente y un posible regreso

En este 2022, con el mítico Tony Las Russa como timonel, los Medias Blancas terminaron con marca de 81-81, siendo para muchos la gran decepción de todo el béisbol, ya que equipo tenia para ello; Tim Anderson, José Abreu, Yoan Moncada, Luis Robert, Lucas Giolito, Lance Lynn, Dylan Cease…por solo mencionar.

Lesiones, malas formas deportivas,  de igual modo malas decisiones, polémica y mucho más; todo dio al traste con el resultado y ya desde mediados de temporada el desastre se veía venir.

En medio de este contexto La Russa pidió su retiro y al instante, la figura de Ozzie Guillén regresó a la palestra como el candidato número 1 en las papeletas para asumir como nuevo dirigente.

El hijo pródigo

¿El retorno del rey?, pensaran y lo creen muchos y ya se habla de una segunda temporada de Guillén en Chicago, pero al respecto, el hoy analista de béisbol conversó con NBC Sports, alegando que en el momento actual no está entre sus planes dirigir.

No obstante, aseveró que si la gerencia lo tiene en cuenta y creen que puede ayudarlos el próximo año, estaría abierto a escucharlos y con ello se abre la puerta para el posible retorno a casa.

Ozzie Guillén, vistió la franela de los Medias Blancas como jugador, entre 1985 y 1997, para después, en 2004 recalar como director, hasta la campaña de 2011.

Su posible regreso es algo que ven con buenos ojos, una gran parte de la fanaticada de los Medias Blancas y de la pelota en general.