A la hora que pegó el jonrón el campocorto puertorriqueño, Carlos Correa sabía que los Guardianes de Cleveland estaban o están a tan solo a un juego de de diferencia de los Mellizos de Minnesota quiénes están de segundos en la división del centro de la Liga Americana.
El paracorto de Puerto Rico sacudió este domingo 4 de septiembre su petardo 16 del año en una campaña que la salud no lo ha podido acompañar en los momentos más cumbres.
La víctima en este caso de Correa fue el serpentinero de los Medias Blancas Lucas Giolito quién le permitió el estacazo a Correa que se fue por los lados del jardín izquierdo con central. La pelota viajó a una distancia de 397 pies con una velocidad de salida de 108.7 millas por hora.
Pese a la distancia y colocación la bola con hilos rojos solo se habría ido en 5 de los 30 estadios del mejor béisbol del mundo.