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Los Rays de Tampa Bay realmente son un equipo de época. El cuadro de la bahía se ha logrado mantener en lo más alto de las Grandes Ligas durante los últimos años y luego de un 2022 en el que se quedaron cortos, han vuelto a arremeter en este 2023. Lo han hecho con una increíble mezcla de buen bateo y excelente pitcheo que les ha permitido no sólo dominar a placer la difícil División Este de la Liga Americana, sino también romper algunos récords de inicio de campaña.

Por ejemplo, los Rayos que son dirigidos por el extraordinario mánager Kevin Cash igualaron la marca de más encuentros consecutivos ganados desde el Opening Day hacia delante con 13, algo que no se veía desde que en 1987 los Cerveceros de Milwaukee hicieron lo propio, igualando así la racha de igual data que pertenecía de manera exclusiva en la era moderna a los Bravos de Atlanta, los cuales a su vez habían logrado esto en 1982.

Un nuevo hito

Sin embargo, la ola de registros históricos no se detiene allí para los subcampeones de la Serie Mundial 2020. Hoy consiguieron llegar a 21 cotejos seguidos bateando al menos un cuadrangular, luego de que Randy Arozarena desapareciera la esférica ante los Medias Blancas de Chicago en las inmediaciones de la primera entrada con un compañero a bordo para poner a ganar a la novena del estado de la Florida.

Para más inri, vencieron finalmente en el cotejo por pizarra de 4×3, lo que les confiere su decimoctava victoria de la zafra y les otorga ventaja de 5 juegos sobre los Orioles de Baltimore y los Yankees de Nueva York, las 2 divisas que más se les acercan en su zona. De este modo, destronaron a los Marineros de Seattle de 2019 como la franquicia con más bambinazos en un arranque de ciclo.