Difícil encontrar una figura que fuese más querida en Quisqueya la Bella que Samuel Sosa.

No había quién no supiera su nombre, aún no fuese entendido en el béisbol. Sammy, se convirtió en un auténtico embajador de la media isla y del juego de pelota.

Juan Luis Guerra, Oscar de la Renta y Sammy Sosa eran nuestro localizador geográfico. Sí. Ese pedacito ahí cerca de Cuba.

Sosa idolatrado y querido en todo Estados Unidos, latinoamerica, Asia y en dónde quiera llegara el béisbol.

Cuando Sammy Sosa jugaba se puso de manifiesto literalmente lo de “la lluvia no para mí fiesta” ¿Cuántos dominicanos no buscaron la manera de darle seguimiento a los cuadrangulares de Sosa con radios de pila, emisoras en las viejas camionetas o la manera que fuere pese al país estar devastado por una cruel temporada ciclónica?

¿Quiénes no se emocionaron al ver correr con la bandera americana por todo el terreno de juego al carismático jugador tras los ataques del 11 de septiembre?

¿Cuántos no imitaron el beso en los dos dedos mientras su puño golpeaba en el corazón y señalaba?  El salto y el dedo señalando al cielo dando gracias a Dios, sus gestos tras un hit productor antes de recorrer las bases…

Todos esos eventos los calificamos de inolvidables.

Sin embargo, hoy martes 25 de enero nos olvidamos del protagonista de esos eventos y episodios que nos emocionaron tanto a muchos. Si bien estuvimos en la algarabía de ver ingresar al Salón de la Fama a otro expelotero de los nuestros, David Ortiz, pasamos por alto que fue el último año de elegibilidad para Sammy Sosa. Y que Sosa no alcanzó siquiera el 20%.

Claro que no fue sorpresa. Los números de los porcentajes año tras año eran una crónica de este desenlace. Ahora corresponde al Comité de la Era hacer algo al respecto.

El caso de Sosa es extraño. Bien discutido. Argumentos parecidos a otros jugadores como Bonds y Clemens, castigados por sospecha de uso de esteroides. No obstante, hay otros casos de sospecha de esteroides que corrieron con mejor fortuna. El mismo David Ortiz, Iván Rodríguez, solo por mencionar un par.

Incluso entre los castigados, Sosa lo está siendo con mayor severidad. Mientras (y guardando la distancia) Clemens y Bonds lograron pasar el 65%, Sosa ni siquiera 20%… Ni siquiera 20%.

¿Cuáles otras cosas hay detrás de ese castigo a Sosa? Sí, ¿Qué más aparte de la sospecha de uso de sustancia para mejorar el rendimiento?…Quizás el bate con corcho. Y esto fue abordado en su momento y presuntamente se trató de un hecho aislado en una confusión con sus bates de práctica… Bueno.

Algunos citan que no siguió vinculado al béisbol. Un argumento tonto puesto cada cuál sabe a qué dedicarse tras su jubilación, retiro o cambio de ocupación. Noe s que sea algo inmoral. Mejor ni tocar ese aspecto que queda tan evidentemente absurdo.

Es curioso que se cite lo de un acto de indisciplina dónde supuestamente Sosa abandonó un juego, a lo que él ha respondido que había notificado de ello. No por si aconteció de esa forma o no, sino porque tenemos el caso de un compatriota de Sammy: Manny Ramírez.

Manny Ramírez se caracterizó por su carácter irreverente. “El loco Manny” algunos decían. Tenía sus maneras y un trato no muy cortés con la prensa. No es que fuera la persona más fácil de tratar. Y sumado esto sí dió positivo a esteroides y luego de los controles de MLB al respecto, posterior al 2004. Y no una, falló tres veces y cumplió dos suspensiones.  Y adivinen qué… Manny tiene más del doble del porcentaje de Sammy.

El tema Salón de la Fama y el merecer o no tal reconocimiento, es cada vez más peculiar, por decir de algún modo.

Y que nada. Solo pasé a recordarles a ese héroe deportivo del cuál pensaron jamás se olvidarían.