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Miguel Sanó, el talentoso jugador dominicano, está listo para hacer su regreso triunfal a las Grandes Ligas después de una breve ausencia. Tras su partida de los Minnesota Twins, equipo que había sido su hogar durante más de una década, Sanó ha encontrado una nueva oportunidad con los Los Angeles Angels, quienes han confirmado su inclusión en el roster para el inicio de la temporada de béisbol de 2024.
El dirigente de los Angels, Ron Washington, anunció con orgullo que Sanó, quien pronto cumplirá 31 años, ha demostrado su valía durante el campamento de primavera y ha ganado su lugar en el equipo principal. A pesar de llegar al campamento con un contrato de ligas menores, Sanó ha impresionado con su desempeño en los entrenamientos, lo que ha llevado al equipo a confiar en su capacidad para contribuir en la temporada venidera.
En sus 22 juegos de pretemporada, Sanó exhibió un prometedor desempeño ofensivo, con un promedio de bateo de .200, porcentaje de embasado de .298 y slugging de .400, además de conectar tres cuadrangulares y remolcar diez carreras. Su capacidad para tomar bases por bolas y su capacidad de bateo han sido destacadas, a pesar de enfrentarse a 18 ponches.
Después de una temporada 2022 marcada por las lesiones y una producción limitada, parecía que el futuro en las Grandes Ligas de Sanó estaba en duda. Sin embargo, el jugador dominicano ha dedicado tiempo y esfuerzo para mejorar su condición física, perdiendo cerca de sesenta libras desde su salida de los Twins. Además, su destacada actuación en la liga invernal con las Estrellas Orientales demostró su determinación y habilidad para volver a brillar en el diamante.
Los Angels, con Anthony Rendon y Nolan Schanuel ocupando posiciones en el cuadro interior, ven a Sanó como una valiosa adición que puede aportar poder y versatilidad a la alineación. Con la capacidad de jugar en la antesala, en la inicial o como bateador designado, Sanó ofrece opciones valiosas al equipo de Los Angeles.
Ron Washington elogió el arduo trabajo y la dedicación de Sanó durante los entrenamientos, destacando que el jugador ha cumplido con todas las expectativas y se ha ganado su lugar en el roster. Para Sanó, esta oportunidad representa más que solo volver al juego; es un testimonio de su determinación y su habilidad para superar desafíos en el camino hacia la redención en las Grandes Ligas.