A sus 40 años de edad recien cumplidos, Yadier Molina sigue coleccionando méritos para ser exaltado al Salón de la Fama de las Grandes Ligas en los próximos años.
En su última temporada como jugador activo en Las Mayores, el careta de los Cardinales de San Luis sumó un nuevo hito en su carrera, emulando a otra leyenda boricua.
Molina fue el receptor titular de los pájaros rojos en lo que fue la victoria 6-0 sobre los Cachorros de Chicago y se convirtió en el segundo catcher nacido en Puerto Rico en recibir una blanqueada, uniéndose a Jorge Posada, quien lo hizo con los Yankees de Nueva York en 2010.
El “Yadi” estaba de regreso a la Gran Carpa tras quedarse fuera de la acción desde el pasado 15 de junio debido a una lesión en una de sus rodillas.
El nativo de Bayamón volvió al terreno de juego y de gran manera al setenciar en la segunda almohadilla al venezolano Rafael Ortega en intento de robo, en el primer inning del partido.
El nueve veces ganador de Guante de Oro en la receptoría se combinó en el Busch Stadium con su fiel compañero Adam Wainwright, quien trabajó en siete entradas completas donde solo toleró seis hits, no otorgó boletos y abanicó a cuatro rivales.
Ambos peloteros, de 40 años de edad, estuvieron juntos en la batería por vez número 317 en su carrera, dejando atrás a Warren Spahn y Del Crandall como segunda mejor pareja de todos los tiempos en las Grandes Ligas.
Solo el dúo de Mickey Lolich y Bill Freehan con 324 juegos iniciados superan a los veteranos de la escuadra de San Luis.