Los deportes electrónicos poco a poco van brindando narrativas maravillosas conforme siguen en su crecimiento como entretenimiento de elite, pasada la Valorant Challengers League del sur de Latam, una de las escuadras que más dio de que hablar fueron los argentinos de Nottingham Miedo. La organización quedó en 3er lugar del pasado circuito, llegó a estas instancias sin apoyo económico de un sponsor y con poca presencia de un coach veterano a la hora de entrenar, los verdaderos Ronins modernos.
Nottingham llegó a instancias de la segunda división mediante la clasificación cerrada, lograron imponerse a equipos de renombre y establecidos para llegar a competir a la liga grande buscando el sueño de seguir ascendiendo. En la temporada regular inició con el pie izquierdo, perdiendo fácil en contra de la academia de Leviatan y contrario a tumbarlos, les hizo crecer y desde esa serie fueron otros.
De por sí, las competiciones son exigentes y más allá de la presión de sacar el resultado, sobresalir y demostrar de que están hechos. Nottingham Miedo también tiene detrás la incertidumbre de no poseer una organización que costee los gastos y no saber si mañana o el proximo split se podrá seguir jugando, hacen que cada victoria supiera a gloria.
Con incertidumbre del futuro, contra equipos superestructurados y con coaches de renombre mundial, con el poco reconocimiento, haciendo tiempo para mejorar. Nottingham miedo logró quedar un 3er lugar muy por encima de las expectativas. Un mundo desafiante, valentía, resiliencia para superar los obstáculos en torno a la libertad individual. Los jugadores sin un señor a quien servir los Ronins modernos.