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La jornada 36 de LaLiga EA Sports arrancó con dramatismo en Cornellà-El Prat, donde una conductora perdió el control de su vehículo en medio de una multitud de aficionados. El impacto dejó 13 heridos, generó escenas de pánico y obligó a detener brevemente el partido. La policía cataloga el hecho como un accidente, aunque la investigación sigue abierta.
Una noche de fútbol que comenzó con angustia
El ambiente previo al Espanyol–Barcelona prometía un derbi cargado de emoción, tensión deportiva y un RCDE Stadium a punto de ebullición. Sin embargo, lo que debía ser una cita futbolística vibrante se vio empañada por un hecho lamentable que conmocionó a todos: un atropello múltiple en las inmediaciones del estadio minutos antes del pitido inicial.
El reloj marcaba poco después de las 21:00 horas cuando un vehículo blanco irrumpió de forma imprevista en una zona repleta de aficionados. En cuestión de segundos, la alegría se transformó en caos. Un total de trece personas resultaron heridas, cuatro de ellas en estado menos grave y nueve con lesiones leves, según confirmó el Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM), que desplegó hasta nueve ambulancias para asistir a los afectados en el lugar.
El accidente: una reacción en cadena tras un primer golpe involuntario
De acuerdo con la primera reconstrucción de los hechos, la conductora del vehículo —una mujer de entre 45 y 55 años— habría perdido el control tras un primer accidente fortuito. Según relatan testigos y fuentes policiales, el coche arrolló inicialmente a una joven de forma accidental, lo que provocó la furia de los presentes, quienes rodearon el automóvil y comenzaron a lanzarle objetos.
Acorralada y visiblemente alterada, la conductora reaccionó acelerando de forma descontrolada, embistiendo a una multitud que no tuvo tiempo de apartarse. El vehículo llegó a arrastrar a varias personas varios metros antes de colisionar contra una valla. Las imágenes, que rápidamente se viralizaron en redes sociales, muestran la brutalidad del impacto y la desesperación reinante.
Los Mossos d’Esquadra acudieron de inmediato y lograron contener la situación. La conductora fue detenida en el lugar y permanece bajo custodia mientras se esclarecen las circunstancias. La policía catalana, no obstante, ha sostenido en su informe preliminar que todo indica que se trató de un accidente sin intencionalidad.
Pausa en el partido y reunión de emergencia
El impacto del atropello también se sintió dentro del estadio. A los diez minutos del encuentro, el árbitro César Soto Grado detuvo el juego tras una alerta por megafonía que informaba del suceso y aseguraba que no había heridos graves. Acto seguido, se acercó a la banda para hablar con los delegados de ambos equipos, el técnico del Espanyol y un representante de los Mossos.
La decisión fue clara: una vez confirmado que la emergencia estaba controlada, el partido se reanudó. A pesar de ello, el inicio del derbi quedó marcado por una tensión palpable en las gradas y un ambiente de preocupación en el recinto.
Investigación en marcha y versiones coincidentes
Los Mossos d’Esquadra continúan recopilando imágenes, testimonios y elementos de prueba para cerrar el expediente. Si bien no se descarta ninguna hipótesis en esta fase inicial, el cuerpo policial autonómico trabaja bajo la tesis de un accidente provocado por una combinación de circunstancias desafortunadas y un estado de pánico por parte de la conductora.
“Todo apunta a que no hubo voluntad de causar daño. Fue una reacción nerviosa en medio de una situación muy tensa”, señalaron fuentes policiales a medios locales.
Un susto que dejó secuelas y un mensaje claro
Aunque no hubo víctimas mortales, el atropello dejó heridas visibles e invisibles entre quienes vivieron la escena de cerca. La rápida intervención de los servicios médicos y de seguridad evitó una tragedia aún mayor. Sin embargo, lo ocurrido obliga a replantear los dispositivos de seguridad en torno a partidos de alto riesgo, sobre todo cuando el flujo de gente en los accesos alcanza niveles tan elevados.
El derbi catalán, que debía ser una celebración del deporte, arrancó con el corazón en un puño. El partido siguió, pero nada pudo borrar lo vivido en las puertas del estadio.
El atropello masivo en Cornellá antes del Espanyol – Barcelona
— ️ٓ️ (@CocoExiliado) May 15, 2025