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Didier Deschamps ha sido un estratega eficaz para la selección de Francia, llevándola a logros importantes como el Mundial de 2018 y el subcampeonato en 2022. Sin embargo, su relación con jugadores icónicos como Kylian Mbappé y Karim Benzema ha generado controversia, afectando su popularidad en el entorno futbolístico galo. Este distanciamiento ha suscitado críticas hacia el técnico, señalando la falta de cohesión y cuestionando sus decisiones en la gestión de estrellas que representan a los “Bleus”.

La controversia con Kylian Mbappé

Recientemente, el caso de Kylian Mbappé ha captado la atención mediática tras quedar fuera de la convocatoria para los últimos amistosos de Francia. La decisión de Deschamps ha generado desconcierto entre los aficionados, quienes ven en el delantero del Real Madrid a una pieza clave del esquema francés. En rueda de prensa, el seleccionador se limitó a decir: “Es mi decisión; considero que es mejor así”, sin brindar más detalles, lo que dejó abierta la puerta a diversas interpretaciones sobre la naturaleza de su decisión.

Detrás de esta exclusión parecen existir conflictos extradeportivos, como los rumores de problemas legales del delantero, quien en octubre fue vinculado con una investigación en Suecia por presunta agresión sexual. Las autoridades aún no han emitido veredictos, pero la situación ha aumentado la presión sobre Deschamps, quien intenta mantener la estabilidad dentro del equipo mientras la justicia dicta su curso. En su declaración, el técnico explicó que había mantenido conversaciones privadas con el jugador, aunque evitó entrar en detalles, lo que ha levantado sospechas y reacciones entre los fanáticos de Les Bleus.

La relación tensa con Karim Benzema

Karim Benzema, exestrella del Real Madrid, vivió una historia similar con la selección francesa bajo el mando de Deschamps. Tras ser acusado de chantaje a su compañero Mathieu Valbuena en 2015, Benzema fue excluido de la selección, manteniéndose alejado hasta su retorno en 2021. Sin embargo, su regreso no fue suficiente para reparar su relación con Deschamps, quien mantenía serias dudas sobre su rol en el equipo. Durante el Mundial de Qatar 2022, Benzema sufrió una lesión que lo alejó de los terrenos de juego, y aunque la FIFA lo mantuvo inscrito en la plantilla, ni el técnico ni la Federación consideraron su regreso.

La relación entre Benzema y Deschamps parece haberse deteriorado aún más, al punto de que el delantero no regresó a la plantilla francesa desde entonces, optando por continuar su carrera en el Al-Ittihad de Arabia Saudita. Este distanciamiento afectó a la afición, que percibe la ausencia del Balón de Oro 2022 como una pérdida irreparable para el equipo francés, dejando un vacío tanto en talento como en liderazgo.

La falta de afinidad entre Deschamps y algunos de los referentes de la selección ha abierto una brecha entre la afición y el cuerpo técnico, con un debate creciente sobre la gestión del seleccionador. A pesar de su historial de éxitos, las decisiones de Deschamps hacia figuras emblemáticas como Mbappé y Benzema cuestionan su popularidad y avivan la incógnita sobre el futuro de la selección. Mientras los “Bleus” buscan volver a la cima, el rol de Deschamps sigue siendo objeto de análisis: ¿seguirá siendo el líder indiscutible, o esta controversia marcará un giro en su carrera al frente de la selección francesa?