La polémica Superliga volvió al ruedo. Directivos del A22 Sports Management, se reunirán la próxima semana con los de la Uefa para discutir una nueva propuesta para la creación de un nuevo torneo de clubes europeos, aunque rápidamente se pudo conocer la crítica de La Liga al respecto.
La Liga rechazó la propuesta pendiente de un esquema de varias divisiones al catalogarla como un refrito de la reforma de la Liga de Campeones sugerida por los clubes de élite en 2019 y que luego fue descartada tras la oposición de las ligas nacionales y una alianza más amplia de clubes de primer nivel.
Posteriormente, A22 Sports Management junto a las cabezas del proyecto de Superliga (Real Madrid, Barcelona y Juventus), presentaron el proyecto de 2021 que consistía en la creación de un torneo de 20 clubes con lugares protegidos para 15 miembros fundadores, el cual se vino abajo rápidamente debido al rechazo de todas las partes (FIFA, Uefa, afición e incluso jugadores y técnicos que se pronunciaron en contra).
Desde entonces, el grupo ha desarrollado opciones para un formato actualizado, que tome en cuenta los rechazos de proyectos anteriores como lo son el ascenso y descenso de los clubes y que tome en cuenta equipos de más países.
La UEFA acordó reunirse la próxima semana con el director ejecutivo recién contratado de A22, el ejecutivo de la televisión alemana Bernd Reichart, no obstante, no se dieron a conocer mayores detalles de la reunión.
Ante la situación, la liga española criticó la nueva propuesta de la Superliga, algo consecuente pues se ha pronunciado en defensa de los torneos nacionales cuyo estatus deportivo y comercial se encuentra en riesgo.
La razón principal de la crítica es porque la propuesta se basa en clasificaciones a la Superliga sean originadas en la Uefa Champions League de una temporada a la siguiente, situación que podría afectar los lazos históricos que vinculan la clasificación para los torneos europeos con el éxito en las ligas y copas nacionales.
Cabe destacar que grandes clubes europeos atraviesan momentos duros en el plano económico, por lo que muchos de estos apoyan a la Superliga que de entrada supone una inyección fuerte de capital para fortalecer la competencia y “garantizar el éxito”.
No obstante, dos clubes históricos y propulsores de la Superliga como lo son el FC Barcelona y Juventus, fueron eliminados recientemente de la Champions League, por lo que dejarán de percibir ganancias importantes que ayuden a solventar los problemas económicos.
La idea que se busca es llegar a un punto medio entre los méritos deportivos y las soluciones financieras para evitar una Superliga que cada vez parece estar más cerca de concretarse.
Noticias relacionadas