Your browser doesn’t support HTML5 audio

El Estadio Metropolitano Roberto Meléndez, en Barranquilla, se prepara para recibir a miles de aficionados que serán testigos del enfrentamiento entre Colombia y Ecuador el martes 19 de noviembre. Este icónico recinto, con una capacidad para 46,600 espectadores, no solo es la casa del Junior de Barranquilla, sino también un lugar cargado de historia futbolística y cultural. Desde su inauguración en 1986, el “Metro” ha sido testigo de eventos memorables, tanto deportivos como sociales, que lo han posicionado como uno de los escenarios más emblemáticos de Colombia.

Orígenes e historia del estadio

El Estadio Metropolitano abrió sus puertas el 11 de mayo de 1986, tras seis años de construcción. Su primer partido oficial, un amistoso entre Colombia y Argentina cuatro días después de su apertura, finalizó en un empate sin goles.

En 1991, el estadio recibió su nombre actual en homenaje a Roberto Meléndez, figura destacada del fútbol colombiano que brilló como delantero y entrenador del Junior de Barranquilla, además de ser un referente en la Selección Colombia.

Transformaciones y modernización

El año 2011 marcó un punto de inflexión en la historia del Metropolitano. Con motivo del Mundial Sub-20 organizado por Colombia, el estadio fue sometido a una profunda remodelación que incluyó la modernización de su infraestructura. Se incorporaron tecnologías de última generación, pantallas LED, mejoras en los palcos, y la ampliación de las salas de prensa, transformándolo en un espacio de categoría internacional.

Estas mejoras no solo elevaron el nivel del estadio, sino que también lo posicionaron como sede de importantes eventos deportivos y culturales. Entre ellos, se destacan la inauguración y seis partidos de la Copa América 2001, además de numerosos encuentros de Eliminatorias Sudamericanas que consolidaron su estatus como un lugar fundamental para el fútbol colombiano.

Un recinto cargado de simbolismo

Más allá de sus características técnicas, el Estadio Metropolitano es un símbolo de la pasión barranquillera por el fútbol. Su atmósfera única, con un público que vibra al compás de los cánticos y tambores, lo convierte en una fortaleza para la Selección Colombia, que ha vivido ahí algunos de sus momentos más gloriosos.

La importancia del estadio también trasciende lo deportivo. Su versatilidad ha permitido que sea escenario de eventos culturales, conciertos y actos cívicos, reafirmando su relevancia en la vida social de Barranquilla.

El Estadio Metropolitano Roberto Meléndez no es solo un espacio físico; es el corazón del fútbol colombiano en Barranquilla. Este martes, será el punto de encuentro para miles de aficionados que presenciarán un duelo crucial entre Colombia y Ecuador.

En este emblemático recinto, cada grito, pase y gol resonará con la intensidad de una historia que sigue escribiéndose. Sin duda, el “Metro” es mucho más que un estadio: es el hogar de la pasión futbolística en Colombia.