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El 25 de noviembre de 2020, el mundo del fútbol se sumió en tristeza al conocer la muerte de Diego Armando Maradona. Argentina perdió a su ídolo máximo, pero las circunstancias alrededor de su fallecimiento generaron preguntas e incertidumbre, que aún perduran en el ámbito judicial. Cuatro años después, la causa sigue abierta, buscando respuestas y justicia por una de las figuras deportivas más queridas y controversiales de todos los tiempos. En este artículo repasamos en qué punto se encuentra el proceso judicial, que ha colocado a ocho profesionales de la salud en el centro de un juicio histórico.

La tragedia y sus antecedentes

En sus últimos días, Maradona atravesaba un periodo de salud crítico. A principios de noviembre de 2020, fue internado de urgencia por anemia y un cuadro depresivo. Una tomografía reveló un hematoma subdural, motivo por el cual fue intervenido quirúrgicamente por el neurocirujano Leopoldo Luque. La recuperación se realizó en una residencia en Tigre, Buenos Aires, donde Maradona permaneció bajo el cuidado de un equipo médico. Sin embargo, el 25 de noviembre sufrió un paro cardíaco, y, pese a la llegada de varias ambulancias, no fue posible reanimarlo. Las autopsias posteriores determinaron que el “Diez” había fallecido por una descompensación cardíaca que provocó un edema pulmonar.

La causa judicial: ocho imputados y un juicio inédito

La Justicia argentina abrió una investigación por “averiguación de causales de muerte” poco después de su fallecimiento, que derivó en una acusación por “homicidio simple con dolo eventual”. Esta figura legal apunta a que los implicados habrían tenido conocimiento de que su accionar podría poner en riesgo la vida de Maradona, sin tomar las medidas necesarias para evitarlo. Actualmente, ocho profesionales, entre ellos Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov, enfrentan una posible pena de entre 8 y 25 años de prisión​.

Los demás acusados incluyen al psicólogo Carlos Díaz, los enfermeros Gisella Madrid y Ricardo Almirón, así como la coordinadora médica de Swiss Medical, Nancy Forlini, y el coordinador de enfermería, Mariano Perroni. Pedro Di Spagna, médico clínico, también fue imputado por su limitada supervisión en el seguimiento posoperatorio de Maradona. Según la Fiscalía, este equipo de salud habría fallado en garantizarle un cuidado adecuado y especializado en su delicado estado, actuando con lo que definen como “indiferencia e imprudencia”​.

Novedades y giros en la causa: informes médicos y nuevos testimonios

A principios de 2024, se presentó un nuevo informe médico que sugería que Maradona había atravesado un “cuadro agónico de corta duración”, lo cual, según algunos peritos, podría contradecir el informe original de la causa. No obstante, la Fiscalía de San Isidro desestimó estos argumentos al considerar que no aportaban pruebas concluyentes para modificar la carátula de homicidio.

En cuanto al proceso judicial, los acusados han adoptado diferentes estrategias de defensa. Gisella Madrid, una de las enfermeras, optó por un juicio por jurado, mientras que los demás acusados se inclinaron por jueces técnicos. A partir del 11 de marzo de 2025, el juicio avanzará, y figuras como Dalma y Gianinna Maradona, Rocío Oliva y Verónica Ojeda, además de Claudio “Chiqui” Tapia, serán llamados a declarar en el tribunal.A cuatro años de su partida, el legado de Diego Maradona continúa vivo, aunque la búsqueda de justicia sigue su curso. Este caso, marcado por complejas aristas médicas y legales, es un hito en la justicia argentina y un recordatorio de la responsabilidad en el cuidado de los grandes ídolos. La resolución del juicio será clave para definir si hubo o no negligencia en el trato hacia el legendario “Diez” y pondrá fin a un capítulo doloroso que ha mantenido en vilo a sus seguidores