Your browser doesn’t support HTML5 audio

República Dominicana enfrenta un golpe duro en su aventura olímpica en París 2024. En el primer partido de la selección sub-23, el equipo dominicano logró un empate 1-1 contra Egipto, pero luego de la éxitosa jornada el siguiente día trajo consigo una noticia preocupante: Fabián Messina ha sufrido una fractura de menisco que podría mantenerlo fuera del resto de la competición.

Messina, quien debutó en los Juegos Olímpicos con una destacada actuación, se ha consolidado como una pieza clave en el mediocampo del equipo. La lesión según los informes médicos es seria. Esta fractura podría significar el fin de su participación en el torneo, un duro golpe tanto para el jugador como para el equipo, que ya había mostrado su potencial en su primer partido.

Fabián Messina, nacido en Stuttgart, Alemania, el 16 de septiembre de 2002, es un futbolista alemán-dominicano que juega como pivote en el FSV Frankfurt de la Regionalliga Südwest. Su carrera comenzó en el SG Sonnenhof Großaspach, donde hizo su debut profesional en 2021 antes de unirse al FSV Frankfurt en 2022. En el ámbito internacional, ha sido convocado para representar a la selección dominicana en el Preolímpico de Concacaf en 2020, aunque el equipo fue eliminado en la fase de grupos.

El equipo de Sedofútbol se enfrenta ahora a una dura prueba. La agenda del día incluye un entrenamiento seguido de sesiones de fisioterapia, descanso. Además, se llevará a cabo una rueda de prensa con Ibai Gómez, Óscar Ureña y el médico del equipo, Txantón Astorkiza, quien esclarecerá los detalles sobre la lesión de Messina y su impacto en el equipo.

El próximo partido de República Dominicana será crucial: se enfrentarán a España el sábado, y el equipo deberá ajustarse a la posible ausencia de Messina. Su pérdida se siente profundamente, no solo por su habilidad en el campo, sino también por el liderazgo y la experiencia que aporta al equipo.

La noticia ha conmocionado a los aficionados y a los miembros del equipo, que ahora deben encontrar una manera de seguir adelante sin una de sus piezas más importantes. La cobertura y el seguimiento continuo serán esenciales para comprender cómo se adapta el equipo a esta nueva realidad y cómo buscan superar el desafío que se les presenta.