Cinco goles marcaron los celestes en un partido que dejó un buen puñado de protagonistas. Buenas sensaciones recobradas, y también la confianza. El City volvió a ser el City, y ofreció nuevamente a sus aficionados el dulce sabor de la victoria.
Con un Etihad Stadium abarrotado por primera vez desde el inicio de la pandemia, los de Pep Guardiola enderezaron el rumbo con una goleada ante un recién ascendido.
Salió decidido el City. Intenso, dominador. Incontestable. Controló el partido desde muy temprano. Y pronto encontró el premio del gol. Gabriel Jesus volvió a actuar en banda pese al debate sobre la posición de delantero centro en el equipo. Fue uno de los más activos y probablemente el más acertado del ataque celeste. Contribuyó a tres tantos en el primer tiempo, aunque solo dos subieron al marcador.
A los siete minutos puso un balón raso al corazón del área para provocar la incertidumbre en la zaga visitante. Entre Grant Hanley y Tim Krul terminaron abriendo el marcador. Cuando se cumplía el primer cuarto de hora de juego, Bernardo recuperó un esférico que terminó en los pies de Jesus. El brasileño volvió a enviar el cuero al área, donde Ferran Torres lo recogió para doblar la ventaja. El colegiado vio falta en el inicio de la juega, y tras consultarlo con el VAR decidió anular la acción.
Solo hubo que esperar siete minutos más para que el brasileño fuera determinante. Otra vez. Una nueva arrancada por la derecha, un nuevo centro, y un nuevo gol. Lo anotó Jack Grealish sin pretenderlo. El balón fue a él, reboto en su gemelo y se coló en la meta rival. En su debut como jugador del City en el Etihad, Jack logró su primer tanto como celeste. En la segunda mitad, y pese a las variaciones de Daniel Farke tras el descanso, los locales pasaron por encima de los visitantes para cerrar una goleada que cargará de confianza al equipo. Aymeric Laporte anotó el tercero de la tarde superada la hora de juego, cuando se hizo con un rebote tras un saque de esquina. Raheem Sterling y Riyad Mahrez entraron en el segundo tiempo por Ferran Torres y Jack Grealish respectivamente, y también vieron puerta en los minutos finales del duelo.
Con el debate abierto sobre la posible contratación de un delantero centro, el 9 del City actuó en banda frente al Norwich. Y fue el más destacado del partido.
Gabriel Jesus no se cansó de arrancar en banda, ya fuese la derecha en el primer tiempo o por la izquierda en el segundo. Ofreció dos asistencias, provocó el primer tanto del partido y también contribuyó en otro que finalmente no subió al marcador. El brasileño dio argumentos a Pep Guardiola para que el catalán siga apostando por un falso nueve liderando el ataque.
FUENTE: Mancity.com